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Chapa y pintura para los talleres vecinales

* La renovación de la programación del curso 2014/2015 supone un centenar de variadas actividades

* La concejalía de Participación Ciudadana se muestra «muy satisfecha» de que se hayan inscrito ya 3.615 personas en ellas

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Los centros cívicos repartidos por la ciudad de Granada han logrado una masa social que participa activamente en las actividades organizadas a través de los talleres.

Son casi un centenar y están repartidos entre los nueve centros cívicos de la ciudad, de Norte al Zaidín, de La Chana a Genil, que aglutinan en el presente curso 2014/2015 a un total de 3.615 personas.

El éxito de los talleres y de la participación ciudadana se basa en la variedad de actividades, su distribución por todas las esquinas de la ciudad y por la innovación.

En esta última característica hace especial hincapié el edil de Participación Ciudadana, Vicente Aguilera, para quien esta dosis de chapa y pintura a los talleres vecinales «permite aumentar la participación ciudadana más allá de las cifras de asociados o de los asistentes a las asambleas vecinales o a las juntas de distrito».

El dato de participación, a su juicio, «es altísimo» y seguimos innovando y mejorando».

AGLUTINAR LA PARTICIPACIÓN

1-La variedad es uno de los objetivos
El Ayuntamiento de Granada, a través de su concejalía de Participación Ciudadana, como coordinadora de la actividad de los centros cívicos de la ciudad, «pretende seguir ofreciendo un amplio abanico de talleres para todos los ciudadanos, consolidando aquellos talleres socioculturales que son demandados por nuestros usuarios año tras año».

2-Se fijan como objetivo la innovación para atraer a los vecinos
«Tratamos de innovar en otras actividades y talleres con el único fin de impulsar y promocionar la participación social y cultural y el desarrollo personal y social en aras de favorecer la mejora de la calidad de vida de nuestros ciudadanos», expresa Vicente Aguilera. También remarca que este esfuerzo «no tiene coste alguno para nuestros ciudadanos».

3-Tercera clave del éxito, la distribución por toda la ciudad
El concejal explica que los centros cívicos se han consolidado durante este mandato como «verdaderos referentes de la actividad municipal en todos los barrios de la ciudad». Añade que «son muchos los recursos, servicios y actividades que se prestan en estos centros, no solo a los usuarios de los talleres, sino también a las distintas asociaciones de vecinos y a los colectivos de distinta índole que requieren nuestros espacios para desarrollar sus distintas actividades a lo largo de todo el año».

LAS CONCLUSIONES
Vicente Aguilera informa en este sentido que «igualmente, en los centros cívicos se desarrollan servicios y prestaciones de carácter ‘desconcentrado’ a través de las oficinas de información y el registro». Es decir, que los vecinos de los barrios ya no tienen que acudir a la Plaza del Carmen para realizar esta suerte de requisitos, ya que existen en los centros cívicos oficinas donde poder realizarlos

En definitiva, continúa Vicente Aguilera, «pretendemos que los centros cívicos de la ciudad sigan siendo un referente en cada distrito de la participación ciudadana a través de la realización de talleres de carácter cultural y social, de la cesión de espacios y en la realización de otras actividades complementarias como conferencias, conciertos, concursos y exposiciones».

MÁS INFORMACIÓN
-El crecimiento de la participación ciudadana a través de los centros cívicos de los distritos, según Vicente Aguilera (Leer aquí el artículo en Cableados)

El crecimiento de la participación ciudadana a través de los centros cívicos

Vicente aguilera

Una de las críticas o, mejor dicho, de las cuestiones sin resolver del movimiento municipalista en Granada es el de la participación vecinal y ciudadana, que desde hace dos décadas, es bastante bajo y está muy limitado.

El concejal Vicente Aguilera valora que no está «muy de acuerdo» con que la participación sea baja en la ciudad de Granada.

Vicente Aguilera explica que «sí  está de acuerdo en que hay que hacer algo para que la gente participe más, pero asociándose, porque si vas a un centro cívico, está lleno de gente, y solo el 3% está asociado».

De hecho, constata que «los granadinos van a las asociaciones de vecinos cuando padecen un problema gordo. Entonces reclaman en la junta de distrito, pero cuando cuando se les soluciona, se van».

Por todo ello, desde su punto de vista, «hay que medir la participación ciudadana no solo a través de las asociaciones de vecinos, sino también la que se genera en los centros cívicos».

También destaca Vicente Aguilera que los centros cívicos son equipamientos socioculturales del Ayuntamiento de Granada «destinados a la promoción social y cultural de los ciudadanos, así como a la participación social de grupos y colectivos».

Entiende que «la creación de recursos municipales que favorezcan la participación y el desarrollo integral de las personas es uno de los objetivos del gobierno municipal, al cual represento».

Atendiendo a este objetivo, se pone en marcha una serie de servicios, prestaciones, talleres y actividades para dar respuesta a las necesidades, intereses e inquietudes de los ciudadanos y ciudadanas: «Es nuestro deseo que los centros cívicos favorezcan y revitalicen la vida asociativa, permitiendo aumentar el grado de participación de la ciudadanía», termina.

MÁS INFORMACIÓN
-Chapa y pintura para los talleres vecinales (Lee el post en Cableados)

Los usuarios soliviantados del Albaicín

Centro Albaicin

 

El Centro Cívico del Albaicín en la plaza Aliatar se ha adaptado a la normativa y ha eliminado las barreras arquitectónicas. La noticia es para aplaudirla pero resulta que ha soliviantado a los usuarios. Un centenar de ellos ha firmado una carta de protesta.

Las dos caras de la moneda, de la misma moneda, ofrecen dos versiones diferentes.

Una de ellas dice: 

«Antes de la obra mencionada, existía una rampa de acceso al centro para sillas de ruedas, a través de la cual podían acceder los dos discapacitados físicos que residen en el barrio. Igualmente, el acceso al mostrador no tenía escalones».

«Actualmente los discapacitados tienen que coger el ascensor, situado a la izquierda, para subir los dos escalones nuevos y dar la vuelta hasta llegar al lado opuesto, donde está situado el mostrador. El cual, tras la obra, ha quedado a una altura de 76 absurdos centímetros».
«Como ciudadanos y vecinos del Albaicín tenemos derecho de saber por qué se ha realizado esta obra tan nefasta, costosa y poco útil, cuando hay prioridades mucho mayores en un barrio que está arriesgando perder el Patrimonio de la Humanidad dada la situación de deterioro grave que sufre».«El coste de la obra ha sido superior a 41.000 euros y los trabajos han durado unos 17 días». Y se preguntan «¿Por qué este malgasto de dinero público (nuestro dinero) en tiempos de crisis? ¿Por qué no se ha invertido en cosas más necesarias y urgentes?». En la carta sugieren,por ejemplo, «arreglar las calles para evitar accidentes de nuestros vecinos mayores, la limpieza de los graffitis ilegales, casas en ruinas con ratas incluidas, falta de mobiliario urbano, como bancos para sentarse nuestros mayores o falta de zonas verdes».

La otra cara argumenta: 

«Son unas obras que se ajustan a rajatabla a la legalidad vigente y que se hacen porque obliga la Junta de Andalucía a cumplir la normativa autonómica».
«Están consensuadas con el órgano pertinente, que es el el Consejo Municipal de Personas con Discapacidad, «que es el órgano máximo de participación democrática de las entidades y asociaciones dedicadas a la atención de personas con discapacidad en Granada».
«Son los técnicos de la comisión de accesibilidad, con los propios minusválidos,  los que deciden las obras de adaptación y de eliminación de barreras arquitectónicas que se van a acometer cada año».
La conclusión:
El Albaicín necesita generar consensos a una velocidad sideral.
CRÉDITOS:
La foto, de González Molero