Hoy es uno de esos días que merecen ser recordados especialmente. De una parte estaba repasando el curso celebrado sobre violencia de género celebrado por una psicóloga especializada en la materia, complementado con un mes de clases de pintura al óleo para que cada una de las participantes expresara sus sentimientos acerca de ese tema y cerrándose con la exposición acompañada de unos poemas. El cierre final estuvo coordinado por el Ayuntamiento, organizándose una charla informativa sobre protocolo de actuación en casos de violencia de género con los agentes Raquel, Alberto y la trabajadora social, Esther quienes de forma muy profesional y al mismo tiempo muy entendible, explicaron con contundencia la forma de proceder en tales situaciones.
Pero venía contando todo esto, porque justo en ese momento me han entregado este magnífico retrato realizado por una joven pintora de la localidad que me ha entusiasmado enormemente y que guardo con mucho cariño tanto en papel como en formato electrónico. Si a eso le añadimos que acabo de recibir un ejemplar dedicado de mi libro favorito, Pepita Jiménez de Juan Valera que no había leído desde 1981, puedo decir que hoy es un día para recordar.