Dentro de unos minutos -ya sé que siempre doy las noticias a última hora, pero es que me acabo de enterar-, va a salir de la Iglesia de San Pedro y San Pablo -situada en el hermosísimo Paseo de los Tristes de Granada- la procesión de la Sentencia y las Maravillas. Entre el séquito, habrá varios magistrados, ya que la citada hermandad mantiene una estrecha relación con el gremio judicial. Pues bien, don Emilio, nuestro don Emilio se estrena como cofrade. Junto a él estarán el decano de los jueces de Granada, Antonio Moreno, o el juez de Vigilancia Penitenciaria, Pedro Joya.
Don Emilio me ha prometido escribir un comentario para narrar su experiencia. En cuanto tengamos una imagen del ‘histórico’ momento, la colgaremos por aquí. Un saludo a todos. Y perdonad si estamos descuidando un poquillo el blog. Es que la Semana Santa -los de aquí lo sabéis- en Andalucía lo trastoca todo. Seas creyente o no lo seas.
Con todos los respetos hacia la creencia religiosa (católica en este caso), al sacrificio, y relacionado con el credo propio amparado por la Constitución (primera referencia, redundancia donde las haya), me parece una noticia irrelevante salvo por el sacrificio físico que merece semejante «trabajo». Y reitero que con todos los respetos.
Y si hago este comentario es que, precisamente basándome en hechos probados, la creencia en una religión en particular es algo tan subjetivo, y su práctica tan íntima, que no merece mayor atención. Si alguien es capaz de demostrarme que Dios existe, toda mi creencia, todos mis postulados morales, serán dignos de cambio, pero hasta el momento no queda más que una opción de «divertimento» social. Y reitero que lo digo con todos los respetos. Y es que me cuesta mucho creer que ese Dios vengativo del antiguos testamento, reconocido por el catolicismo, concuerde con ese dios «benevolente» que sacrificó a su propio hijo para nada (porque pecadores sigue habiendo y muchos, y digo yo que según el dogma católico merecerán el Infierno, con lo cual su sacrificio fue en balde, máxime si consideramos a esos «pobres infieles desafortunados que no conocieron de la existencia de Cristo, como los nativos precolombinos).
Precisamente fue un profesor de la faculta el que nos mostró (aunque no hiciera falta por uso de la simple lógica), que las religiones se prevalen de cualquier argucia para mantener «doblegada» (obsérvese el entrecomillado) a la plebe.
No creo que el hecho de que alguien Omnisciente como Dios, por puro afán protagonista, sea capaz de sacrificar de manera tan vil a su propio hijo, sólo para demostrar que es misericordioso (algo que contradice el antiguo testamento), y pese a que los humanos seguimos siendo tan miserables como al inicio de nuestro descenso de los árboles. ¿Acaso es tan egoísta que sólo pretende que le idolatren? si fuímos hechos a su imagen y semejanza, dado el patetismo humano, sólo cabe presumir el patetismo divino (reitero que manifiesto estas opiniones en base a mi libertad religiosa). Y para mí, un dios tan ególatra no merece compromiso alguno, pues muestra síntomas de ser heredero de la más pura mitología griega, e incluso egipcia.
Y eso sin entrar en el detalle de que científicamente nadie ha demostrado esa existencia más allá de la vida terrenal, pero sí que se puede demostrar como hoy he visto sendos accidentes de tráfico por culpa de la cera vertida sobre la calzada.
¿Cómo «demonios» podemos ser los humanos tan sumamente racionales y estúpidos a la vez? Quizás Dios sólo sea un crío que se divierte viendo como juegan los hamsters en su jaula.
Y reitero por enésima vez, que sólo hago uso de mis libertades de expresión y religiosa amparadas por los artículos 16 y 20 de nuestra Constitución. Y dicho sea de paso, con todo respeto a las creencias de Don Calatayud, totalmente legítimas (aunque no comparta, en dicho aspecto beato-religioso).
Para un servidor, el ser humano no es obra de Dios, sino del Diablo, lo cual aparte de deprimente demuestra que éste prima sobre áquel, y todas las barbaridades que se comente a diario lo demuestran. Si Dios fuera tan misericordioso y plenipotenciario, se impondría a Satán y acabaría con tanta injusticia, pero no veo que eso ocurra, lo cual me induce a pensar que es sólo una fantasía humana creada al amparo del temor a la muerte, y la consiguiente inexistencia de Dios; o a que a éste se la «trae al pairo» lo que le ocurra al mundo mientras se le demuestre la reverencia que exige, lo cual su vez es manifestación de egolatrismo y dictadura, lo cual a su vez legitima los regímenes absolutistas que a lo largo de la historia ha manifestado la humanidad, ya que se amparaban en dicha legitimación divina, y no hacían sino emular a aquel a cuya imagen y semejanza fuimos creados.
Joer, cómo se me notan los bajones anímicos últimamente. Menudo ladrillazo solté.
Se nota que no comulgo con la religión, con ninguna, y que cada vez tengo menos fe en el hombre, pero tampoco es plan de irme por los cerros de Úbeda como en el post anterior. Así que si sirve de algo, recomiendo no leerlo, por pesado.
También me disculpo por los errores ortográficos y sintácticos que he observado tras releerlo casi un día después.
Creo que como penitencia el año que viene me hago costalero.
Menos mal que no eres católico, porque si lo fueras no me puedo imaginar el rollo que habrías metido, sinceramente pareces un cura en el sermón. De todas formas cuando no se tiene fé, es lo que hay, o se tiene o no, cada cual con lo suyo. Aquí lo importante es que nadie te obliga a creer, lo que me llama la atención es que no crees en Dios pero sí en el Diablo…Pero desde luego te doy la razón, «las armas las carga el Diablo», dirigiendo la mano del hombre…
De verdad, menudo rollo de sermón habría soltado, jajajaja.
Sí se podría entender que creo en el Diablo, porque el muy jodío esta dando pruebas de su existencia continuamente… o incluso es más simple, justificamos nuestro patetismo achacándolo a un ente superior que nos conmina a ello, cuando todo es más simple: sencillamente somos así de perversos.
Es como el tema de Hitler, a veces se habla de él como si hubiera sido una especie de monstruo, y lo triste del asunto es que no era un monstruo, era un humano, y demostró lo crueles que pueden ser los humanos, lo cual a se vez demuestra que actitudes como la suya pueden volver a suceder.
Desde luego, si existen Dios y el Diablo, parece que están jugando al ajedrez con nosotros, y que el último lleva ventaja.
No veas solo lo malo, piensa en que también hay gente buena, demasiado buena, lo que pasa que es más fácil actuar mal, el bien es más dificil…(Por Dios!, parece que esté evangelizando)…Y sube esos ánimos!!!!
Por cierto, ví al juez en la procesión, y al principio pensé: » este debe ser uno de la tele, porque me suena…), anda que iba yo bien, pero enseguida «caí» y me dió tiempo de hacerle hasta una foto. No sé si ponerla en un marco y presumir de que somos amigos, jajjaja…(es broma).
eSTE VIDEO LO DEBERIAN VER MUCHAS MUJERES Y HOMBRES PARA APRENDER DE LA VALENTIA DE UNA MUJER QUE TIENE LOS DIAS CONTADOS,RECUERDEN SU NOMBRE.
y POR FAVOR EXTIENDANLO POR LA RED EN SU MENORIA,YA QUE NO TARDARA EN MORIR POR SUS DECLARACIONES.
Se llama Wafa Sultan es psiquiatra, ex-musulmana, siria.
¡¡¡Es asombrosa su claridad y valentia!!! aunque mucho me temo que
puede tener los días contados……
http://es.youtube.com/watch?v=nUJhPrskAk0
Pues yo no veo tan disparatado el discurso del «Doctor». Quizá sí que es cierto que lo ha llevado al extremo más radical (permítanme la redundancia), pero no le falta razón.
Y ya que estamos metidos en el tema, hay algo de «la charla» de D. Emilio, que no me cuadró mucho cuando lo escuché:
En el decálogo para formar a un delincuente, el punto dos, si no recuerdo mal, dice: “No se preocupe por su educación espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente”.
Pues bien, espero Emilio que no te estés refiriendo a la religión (la que sea), porque no tendría sentido. ¿O es que una persona atea no puede formar buenas personas?. No creo que la religión y los valores fundamentales para ser una buena persona vayan intrínsecamente ligados. A mi hija no le estamos inculcando ninguna religión, porque sí que queremos que ella, el día de mañana, decida qué camino coger, en este sentido. Porque entendemos la religión como un método de consuelo. Una reflexión individual y honesta. Algo tan íntimo que no se puede inculcar si no es coherente para ti, porque no tendría sentido, sería como hacerte trampas jugando tú sólo al solitario. Y hoy por hoy, no hay ninguna religión que “case” exactamente con mis ideas “espirituales”. Yo no soy atea, pero tampoco soy católica y menos practicante. Por lo que he leído, a lo que yo pienso (más o menos) le han puesto un nombre, “agnosticismo”. Me parece muy hipócrita casarse por la Iglesia, bautizar a los hijos, que tomen la Comunión…, sólo porque es lo que toca, por inercia, sin plantearse si eso es realmente lo que quieren, yendo en contra de lo que su razón y su corazón les dice, porque muchas de esas personas no cuentan para nada con la Iglesia, sólo en los momentos en los que hay que “destacar” (bodas, bautizos, comuniones, Misa de Palma –para estrenar ropa por supuesto-, hasta en los entierros hay quien va sólo a que se les vea!!). Yo no quiero ser así ni que mi hija lo sea. ¡Ojo! El que lo haga realmente porque su razón o su corazón lo sienta así, me parece perfecto, no seré yo quien juzgue eso, lo respeto. Pero que también me respeten a mí por no profesar lo mismo. A mi hija intentamos inculcarle valores como el respeto (fundamental), la empatía (palabra tan de moda últimamente, aunque mucha gente no se pare a pensar qué significa realmente), la tolerancia (tan necesaria hoy en día, debido a la ingente inmigración de personas con culturas tan diferentes a la nuestra), el amor (tan olvidado), la positividad y el sentido del humor (tan necesarios en los momentos duros), el esfuerzo y la priorización (porque para entender el mundo de los adultos es indispensable)… Sin tocar para nada ningún tema religioso o espiritual. Por supuesto tengo mi opinión al respecto, y si mi hija me pregunta no voy a esconderle nada, le contestaré a todo lo que pueda, sobre cualquier religión, y a lo que yo no sepa contestarle, lo investigaremos juntas para aprender las dos. Con sinceridad y claridad. Si el día de mañana mi hija se hace monja porque es realmente lo que la hace feliz, yo también seré feliz. Siempre digo que con que sea feliz me da igual que sea “monja que puta” (con perdón). Con esto quiero decir que entiendo que mi hija es una persona diferente a mí, con personalidad propia, que hay que ir asesorando y guiando, pero que también hay que respetar.
Uf! Voy a darme un masaje en los dedos.
Isabel, el humano «evolucionó» antes que la religión, de hecho ésta es consecuencia de aquella (un mecanismo de control de masas, una manifestación del temor a lo desconocido… quién sabe). Así que sólo por eso estoy de acuerdo contigo: Una cosa es sociabilizar adecuadamente a nuestros hijos, conforme a unos valores que le conviertan en una persona de provecho adaptada a la sociedad que nos toca vivir (o padecer, según el caso), y otra crear toda una estructura dogmática basada en postulados no probados y amparados en base al ambiguo concepto de Fe.
Yo lo tengo clarísimo: mis hijos serán libres para decidir, cuando tengan la edad necesaria, si optar por profesar un credo u otro o ninguno. Pero que cuando lo hagan, sean conscientes del porque y del como. Lo que les inculco desde niños es el respeto a las normas sociales esenciales para que no sean unos desacarriados, pero si tenemos que llevarlo a niveles existenciales superiores o extraños al mundo en que vivimos, prefiero que escojan por sí mismos cuando tengan juicio suficiente para ello.
Y con todos los respetos, viviendo en la era de la «razón», de la «lógica» (nótese el entrecomillado), ampararse en postulados indemostrables hoy por hoy me parece una perdida de tiempo. Si ya es jodido vivir en el mundo actual, poca pena me merece al menos a mí, perder tiempo pensando en cómo será un más allá que desconocemos siquiera si existe.
Si mis hijos deciden dedicarse a la vida eclesiástica, lo respetaré, pero que lo decidan cuando tenga juicio y conocimiento suficiente, no cuando aún son volubles en su formación.
Venga, yo también voy a darme un masaje en los dedos, porque llevo una temporada…..
Y que conste que el sacrificio de los penitentes, costaleros, y demás personajes de estas fecas, es encomiable por el sacrificio, pero por más que lo pienso, me parece tan absurdo, me da la sensación de que implica tal perdida de tiempo, que no acabo de concebirlo como algo lógico.
Sobretodo cuando ves a esos «auditores» que colapsan las calles y no te dejan pasar por la calle temiendo que les «robes el privilegiado sitio» para observar la procesión de turno, cuando lo único que quiere servidor es transitar lo más rápido posible por las calles granadinas, y que le da igual la dichosa procesión. Pero ellos temen el robo de su privilegiada ubicación, y como buenos cristianos, o no te dejan pasar, y/o argumentan que pretendes colarte con todo el morro, llegando algunos incluso a amenazar con el uso de las «manos» (muy cristiana dicha actitud, dicho sea de paso).
Los valores espirituales no solo se basan en la religión o ¿es que los agnosticos o ateos no los tienen?. Estos valores son la moral, ética, saber discernir entre el bien y el mal, toda clase de principios gracias a los cuales el mundo camina…¿porque siempre cuando se habla de educación espiritual se piensa en la religión?, pienso que todo esto parece una caza de brujas contra los católicos, y digo católicos y no digo cristianos, porque no veo esa persecución contra los protestantes, anglicanos, ortodoxos, y muchas religiones más, y ya no digamos contra los musulmanes, que no hay quien se atreva…no sé porque será…
De todas formas si el juez (que no lo sé), opina que los niños deben tener una dirección espiritual, refiriendose a la religión, está en todo su derecho de tener esa opinión y el que no la comparta que no la siga, que aquí nadie está obligado.
Si tan malos somos los católicos, que ya estoy empezando a tener ese complejo, ¿porque no quitan todas las fiestas religiosas católicas de España?, Navidad, San Fermín, Semana Santa, La Virgen de Agosto, San José, San Jordi, incluso Las Fallas en las cuales se hace la ofrenda de flores a la Virgen (la Cheperudeta)…¿Porque en Navidades todo el mundo se apunta al carro de adornar las casas, hacer regalos, felicitar, y todos son buenisimos de la muerte?, ¿porque lo hacen si no son católicos?, o ¿también es una costumbre, como el bautizo, bodas, comuniones..?. Aquí lo que hay es mucha hipocresía, no conozco a nadie que siga el Ramadám sin ser musulman, pero si a muchos que felicitan la Navidad sin ser católicos…
España hace tiempo que es agnóstica, así que ya no hay ningún problema sobre si se sigue una religión o no, lo que ya me molesta es que siempre sea todo en contra de los católicos, siempre se habla del respeto, pero ahí siguen los ataques. Cada uno que eduque a sus hijos como mejor les parezca, nadie les obliga a nada…
Para Isabel:
Creo, Isabel, que el famoso decálogo que lee D. Emilio es de la policía de Washington y así quiero recordar que lo dice él mismo. Como puedes imaginar, esta policía no es católica y está en un país en el que abundan varias confesiones protestantes distintas y un abanico de creencias lo suficientemente amplio (también «descreencias»), con lo que debemos concluir que cuando dice «formación espiritual», es fácil que no se refiera a ninguna religión en particular, pero sí a una serie de principios en los que coincidirían todas: respeto por los demás…por la vida…por la propiedad…ser capaz de ponerse en el lugar del otro… no sé… algo que, de no cultivarse en cierta edad, puede ser difícil hacerlo más tarde. Algunas veces, por preservar a nuestros hijos de influencias que consideramos poco liberadoras, los ponemos en evidencia para cosas que lo son menos.
Y otra cosa que quiero añadir -también para lo que dice «doctor Who», desde el principio de la humanidad ha existido en el hombre el sentido religioso; se puede decir que para dar sentido a su existencia, para explicar lo inexplicable… de acuerdo. No quiero reconocer ahora que sea una necesidad, pero existe y eso es demostrable. ¿Todo se puede explicar a la luz de la razón? Estamos comunicándonos en este momento con un medio que yo no entiendo, pero en el que creo y utilizo. Tampoco tengo claro cómo se las han ingeniado para fabricar la máquina que hace unos días me realizó una resonancia magnética, pero ahí está; de todo no puedo tener un conocimiento lógico, pero me dijo llevar por la lógica de otros más entendidos en quienes confío… espero no estar intentando el proselismo que es, os lo prometo, lo último que pretendo en este momento, aparte de no ser éste lugar ni momento para ello.
Respecto a los «auditores» y sus intenciones… mal; eso no tiene nada que ver con la religión, como tampoco lo tienen que ver muchas de las manifestaciones que vemos en las calles. Los propios desfiles procesionales tienen algo, pero no todo, de religión…No me apetece terminar con una cita del evangelio, pero es que viene al pelo: «por sus frutos los conoceréis». Y eso lo aplico a casi todo. Mientras tanto, me aplico una palabra CLAVE, sin la cual se derrumba el arco de la convivencia: RESPETO. Con este principio se puede vivir sin conflictos entre creencias y a partir de ahí, cada uno que haga lo que pueda para ser más positivo. Saludos. José María.
CARLA: Por supuesto que cuando hablamos de educación espiritual estamos pensando en la religión, porque si pensáramos en valores, estaríamos hablando de otra cosa, de educación para la ciudadanía (o como se le quiera llamar), que no es, o no debería ser, otra cosa más que educar en valores para saber o poder convivir en una sociedad. Nada más. Aquí no tiene por qué entrar ningún tema espiritual.
Basta ya de tanto victimismo. No veo manifestaciones en la calle en contra de los católicos, ni por supuesto, me sumaría a ellas. En cambio, sí que veo manifestaciones de los católicos en contra de otros sectores de la sociedad. Eso no es amar al prójimo como a ti mismo, creo. Tampoco ha dicho nadie que los católicos sean malos (he repasado los post), sólo que hay y siempre ha habido, en la religión católica, mucha hipocresía. La «Santa Madre Iglesia» ha sido demasiadas veces, demasiado avara. Demasiado ambiciosa. No creo que ése fuese el mensaje que les dejó Jesús a sus apóstoles (que sí puedo creer que existiera, pero desde luego no como nos lo pintan). Pero los hombres son hombres, con sus equivocaciones y sus debilidades. Hay que reconocer que tantos años de franquismo tampoco ayudaron mucho, y que lo que ahora queda, en muchas personas, es rencor y decepción. El poder eclesiático va perdiendo «fuelle» y ya no se le tiene miedo. Sí, miedo. Ha habido mucho miedo por falta de conocimientos y exceso de Fe, por parte de la gente de a pie.
En mi casa sí montamos el árbol de Navidad (belén no), nos hacemos regalos y nos reunimos en familia para comer o cenar… Pero para mi es más una tradición familiar que una festividad religiosa. Además mi familia sí es católica y yo lo respeto, como ya he dicho antes. No hay nada en mi vida que me incite a seguir el Ramadán. No tengo familia musulmana, ni el país donde vivo es mayoritariamente musulmán. Y si hablo de la religión católica, que no de los católicos, es porque es la religión de la que desciendo, la de mis antepasados, la que me rodea -aunque cada vez tengamos más libertad para elegir-, la que más conozco. Una vez me contaron que aquí, en mi pueblo, una pareja no bautizó a su hijo, por los motivos que fueran, y en la guardería, en el teatro de Navidad, representó al niño Jesús (todavía era un bebé). Pues bueno al parecer hubo personas que los pusieron a caldo llamándoles hipócritas y no sé qué más. Esto es: o estás conmigo o contra mi. Me parece llevar las cosas al más completo absurdo.
Yo no intento convencer a nadie de nada, ni critico a las personas que se consideren religiosas. No voy preguntando a la gente si profesa alguna religión, antes de tomar confianza, como tampoco pregunto si se acuestan con personas del mismo sexo, o no, o si han interrumpido voluntariamente algún embarazo, o si utilizan preservativos, porque lo que me importa de las personas va más allá que todas estas cosas tan PERSONALES que sólo atañen a uno mismo.
Por supuesto que Emilio puede pensar lo que quiera, faltaría más, igual que tú e igual que yo. Mi opinión, expuesta en mi post anterior, no lleva implícita la necesidad de entendimiento por tu parte, ni por parte de Emilio, ni por parte de nadie. Sólo es eso, una opinión más. ¿Que no «liga» con la tuya?. Pues chica lo siento. Pero más siento que te hayas sentido ofendida, porque para nada era mi intención atacar a nadie. Y menos a ti que no te conozco de nada. Siempre he pensado que, en cualquier tema, cuantas más versiones distintas se conozcan, más cerca estaremos de la verdad. Aunque como dijo aquél: todo es relativo…
Para José Mª: Respecto a lo de que el Decálogo proviene de la policía de Washington sí lo sabía, pero como no ha sido a ellos a quien se lo he escuchado, si no a Emilio, pues a él me refiero.
Acto seguido has dicho: «esta policía no es católica y está en un país en el que abundan varias confesiones protestantes distintas y un abanico de creencias lo suficientemente amplio». En esto tengo mis dudas, ése es un país con demasiada doble moral… pero ese es otro tema.
Respecto a «Algunas veces, por preservar a nuestros hijos de influencias que consideramos poco liberadoras, los ponemos en evidencia para cosas que lo son menos». En mi caso no es correcto. No considero la religión poco liberadora, todo lo contrario, pero cada cual la suya, la que le sea más coherente, tenga nombre o no, sin interferencias externas.
Le agradezco a B52 el enlace que ha puesto en su post. He visto el vídeo y, aunque en muchas cosas no estoy de acuerdo con lo que Wafa Sultan (la protagonista) dice, hay algo en su discurso que tomo como mío porque resume muy bien parte de lo que intento decir: «Puedes creer en las piedras si quieres, siempre que no me las tires a mi».
madre mia la labia que tiene la gente por aqui menudos comentarios… super super largoooooooooooooooooo jejeje