COSAS VEREDES

En ese retrato incompleto que nos ofrece el CIS, en cuanto a intención de voto, resalto la subida de Ciudadanos y la bajada de Podemos. No son buenos momentos para la política y lo cierto es que nadie, a juzgar por el último barómetro, logra un aprobado. Cuestión que, aunque me parece injusta, hay que observar con desaliento y reflexión crítica porque algo falla cuando la sociedad consultada se expresa, queda que queda, sobre nuestros líderes. En positivo ya iba siendo hora de que los ciudadanos reconocieran, por sus obras, a unos y otros y es bastante coherente el ascenso del partido de Ribera y el descenso de la formación de Iglesias.

La sublevación independentista catalana, trapicheando alocadamente una república ad hoc para provocar al estado, ha conseguido su objetivo, por ahora, fuera de la ley. A dicho Aznar, a la cadena Ser, – hacía una veintena de años que no pisaba un locutorio de Prisa- que ha faltado política por parte del gobierno. Cuando los toros se quieren ver desde la barrera…La política que tratan de alcanzar los secesionistas es la de la ruptura con el estado y eso no es discutible con la Constitución en la mano. ¿A qué política se refiere Aznar?

Puigdemont, que se podría haber marchado a Somalia, se pasea por Bruselas como Pedro por su casa diciendo cosas al revés para que se le entienda. Da la impresión de que Bélgica no forma parte de la UE porque hasta los próximos días no se sabrá la suerte que correrá este tarambana aclamado, en Bruselas, por doscientos bastones de mando de regidores catalanes autosuficientes. La justicia española, como es sabido, está a la paciente espera de saber que decide la justicia belga con el expresident y los cuatro exconsejeros prófugos. Lo lógico- al menos dentro del marco de Europa- es que el delincuente que delinque en su patria sea su patria quien le juzgue.

Los tránsfugas, cínicamente, proclaman que son presos políticos por si surge algún `incauto´ aliado. Hasta ahora el mayor apoyo se lo ha dado Nicolás Maduro, máximo defensor de las libertades y constatado papanatas mundial que ha pedido, vehementemente, al gobierno español que ponga en libertad a los presos políticos como viene haciendo él en Venezuela. Lo inaudito es que el pretencioso, `Carlos I,  presidente de la república catalana, en el exilio,´ quiere encabezar una lista a las elecciones del 21-D. Si es elegido lo mejor sería dejarlo en el exilio y aplicar, de nuevo, el 155.Todos los españoles pensábamos que activar el 155 en una comunidad autónoma era como dejar a un ciempiés  con dos patas. Así es que nada es como parece. El gobierno y los partidos constitucionalistas han sido mesurados, y los órganos judiciales más que prudentes. Por eso comentaba al principio que me parecía injusta la apreciación popular hacia el Partido Popular y el Partido Socialista que hay que reconocer que junto a Ciudadanos han sido los que han abierto el paraguas para aguantar el inesperado chaparrón.

Esperemos que no se repita el dislate porque, objetivamente, la economía en Cataluña desde que se inició la esperpéntica cadena de despropósitos se está resintiendo seriamente y está afectando a los diversos sectores productivos. Muchas industrias y corporaciones bancarias han hecho `fu´ como el gato, porque pueden hacerlo pero otras, atornilladas al hormigón, como la hostelería, están en la merma del descabellado despropósito independentista. La semana se cierra con el expresidente Arturo Más, de hermano limosnero, mendigando con hucha “un poco de generosidad” a los que votaron el 9N para pagar su fianza y  la anatemática Carmen Forcadell, expresidenta del parlamento catalán, ante el juez renunciando a Satanas, a sus pompas y a sus obras y depositando 150.000 euros de curso legal para no permanecer en chirona. Cosas veredes que farán fablar las piedras.