EL PACTO DE LOS ALCALDES, UNA APUESTA POR UNA ENERGÍA SOSTENIBLE LOCAL

«La sociedad Comprometida»

Contaminación en Granada
Contaminación en Granada

En 2007 la UE aprobó el paquete de medidas “Energía para un mundo en Transformación”, con el objetivo de reducir las emisiones de CO2 en un 20% para el año 2020, a través de dos intervenciones: aumentar en un 20% la eficiencia energética y cubrir un 20% la demanda con renovables.
Para abordar dicho asunto, la UE considera imprescindible implicar a la Administración Local, la institución que mejor puede dar ejemplo a la ciudadanía por su proximidad. Así surge el Pacto de los Alcaldes, por el que sus municipios se comprometen a llevar a cabo algunas de las siguientes medidas:
•    Reducción del consumo en edificios públicos.
•    Optimizar el transporte y el alumbrado público.
•    Orientar la planificación urbana y la organización del transporte.
•    Incorporar las energías renovables en los nuevos edificios.
•    Favorecer la producción local de energía.
•    Concienciar a la ciudadanía.
•    Adoptar modelos de excelencia mundiales sobre desarrollo energético sostenible.

Para ello deberán elaborar un inventario de emisiones de referencia (documento Huella del Carbono), en el que se analicen los consumos eléctricos y de combustibles de los vehículos e instalaciones municipales, a raíz del cual se desarrollará un Plan de Acción para la Energía Sostenible (PAES), que se promoverá internamente mediante estudios específicos, y externamente a través de ordenanzas, campañas de concienciación o bonificaciones fiscales.
Hasta la presente, en Andalucía se han adherido el 65% de los municipios (sólo el 40% de los granadinos), con el apoyo de la Consejería de Medio Ambiente para los más grandes, y el apoyo de las Diputaciones para los más pequeños, institución que en el caso de Granada ya viene realizando actuaciones en tal sentido a través del Plan Provincial por el Clima, por el que se han sustituido lámparas de bajo consumo en el alumbrado público, se ha favorecido la producción fotovoltaica, se ha cambiado a calderas de biomasa y se han confeccionado estudios de movilidad.
Se está por tanto ante una nueva declaración de buenas intenciones para atajar el cambio climático, aunque en esta ocasión atacando donde más  se puede hacer, en el cuerpo a cuerpo que ciudadanos y ayuntamientos mantienen en el día a día. Por eso hay que celebrar la iniciativa e instar desde los distintos frentes a que todos los municipios se adhieran a la propuesta y desarrollen los citados documentos Huella del Carbono y Plan de Acción, para lo que sería muy conveniente, especialmente de cara a optimizar los recursos públicos, que dichas iniciativas se incorporasen en los documentos de Agenda 21 Local y PGOU correspondientes, evitando así la proliferación de información descoordinada, que confunda a ciudadanos, y favoreciendo soluciones integradas, que garanticen el éxito.

Juan Garrido Clavero, Asesor Ambiental de GRarquitectos