COSTA DE CÁDIZ (ENSENADA DE BOLONIA). Observatorio virtual del paisaje Mediterráneo (7)

Litoral Atlántico

En el marco del litoral andaluz, la playa y ensenada de Bolonia representa una notable excepción: un paisaje entre natural y cultural de singular belleza en el que la implantación urbana y turística ha sido hasta el momento relativamente limitada. La existencia de amplias superficies de montes públicos, la inclusión en el parque natural del Estrecho de Gibraltar, las afecciones derivadas de la protección arqueológica o la limitación que supone para el turismo los fuertes vientos de levante han contribuido a mantener un paisaje en el que los potentes elementos naturales que lo configuran siguen mostrándose como dominantes. Ello hace que todavía sea posible observar la transición, en un suave plano inclinado, entre los componentes paisajísticos del mundo rural (masas forestales, matorrales, pastos ganaderos) y los del litoral (dunas, playas, mar).

 

A pesar de esa destacada singularidad, la Ensenada de Bolonia no es una entidad territorial aislada, puesto que comparte muchas de las características de un espacio progresivamente más amplio que deja notar, de un modo u otro, su  influencia en este rincón del litoral gaditano: el municipio de Tarifa, la comarca del Campo de Gibraltar o el litoral atlántico del Estrecho. Una influencia no sólo actual o reciente, sino desde hace milenios: el territorio dependiente de la ciudad púnica y posteriormente romana de Baelo Claudia, cuyos vestigios arqueológicos se localizan en el corazón de la Ensenada, transcendía los límites de este marco físico. Este hecho resulta fundamental para entender la propia villae (su morfología, sus funciones, su entidad), sus habitantes y la evolución de su entorno, el ámbito del Estrecho, al ser un importante punto de contacto entre continentes y culturas.

 

De hecho, la Ensenada de Bolonia ha sido objeto de transformaciones y usos alternativos a lo largo de la historia humana desde sus primeras ocupaciones. A este respecto, las antiguas actividades agrícolas han desaparecido prácticamente y del aprovechamiento de los recursos marinos apenas quedan registros arqueológicos (por ejemplo, concheros pre-romanos asociados a localizaciones litorales; producción romana de garum y otras conservas de pescado, etc., como así sucede con la industria alfarera, esencialmente de ánforas para comercializar las conservas de pescado;  o las almadrabas desde el siglo XIII, etc.), si bien permanecen algunas explotaciones ganaderas, sobre todo bovinas (raza retinta) y forestales (limpieza y explotación del corcho). Pero actualmente son las actividades turísticas las que dominan en este espacio, que incluye desde el turismo de playa, incluidos deportes náuticos, al cultural (Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia) y al denominado “turismo rural” sobre la base de lo anterior y de una interesante red de itinerarios y de miradores.  

 

Entre los aspectos que refuerzan la consideración de este espacio como entidad paisajística de fuerte carácter está, por un lado, la envoltura completa de la ensenada por relieves de diferente altura (las dos sierras de mayor entidad, San Bartolomé y La Plata, y la unión de ambas a través de un relieve de menor altura, la Sierra de la Higuera, se perciben como un recinto cerrado en forma de anfiteatro, generando una cuenca visual cerrada en torno a la Ensenada); por otro lado, la presencia de dos hitos fundamentales, uno natural y otro cultural: la gran duna rampante, un elemento del paisaje litoral andaluz que ha sido sistemáticamente eliminado en muchos otros lugares durante los más recientes procesos de urbanización, y las mencionadas ruinas arqueológicas de la ciudad púnica y romana, evocadora de la antigua colonización humana de esta parte del litoral andaluz. Junto a lo anterior, al encanto paisajístico de este enclave contribuye la armonía existente entre la variada base geomorfológica (sierras, lomas y colinas, acantilados, cordones dunares y cordones de cantos, playas arenosas y restingas) y botánica (coníferas, eucaliptos, quercíneas, matorral asociados a arbolado, matorral denso sin arbolado, espacios de vegetación rala), así como a la organización geográfica (zonas forestales, pastizales, restos de campos agrícolas, asentamientos antiguos y recientes…), conjugándose todo ello para producir unas cualidades visuales atractivas y dotar de ese carácter paisajístico singular a la Ensenada de Bolonia.

 

 

 

1.     La duna rampante de Bolonia

La destrucción de las formas dunares por la ocupación urbana y la construcción de paseos marítimos es una constante en todo el litoral atlántico andaluz. La preservación de esta duna, la de mayores dimensiones de la región, puede considerarse como un hecho excepcional, lo que revaloriza aún más su valor ambiental y paisajístico.

2.     La ciudad histórica

Baelo Claudia, fundación púnica, fue en época romana la segunda ciudad en importancia en el área del Estrecho, situada en el camino entre Carteia (en la Bahía de Algeciras) y Gades. Su prosperidad urbana es todavía perceptible en el paisaje actual: un notable foro con edificios públicos entre los que destacan tres templos, baños públicos, el teatro, instalaciones para la industria pesquera… Hoy, estas ruinas arqueológicas aportan un recurso de especial valor para el paisaje de la Ensenada.

3.     Roquedos

Los roquedos de la Loma de San Bartolomé cierran el paisaje de la Ensenada. Un relieve abrupto, donde son bien perceptibles algunos escarpes de falla, y  con una densa cobertura forestal (acebuches, encinas, pinos piñoneros) que, en parte, es resultado de repoblaciones contemporáneas.

4.     Los usos urbanos actuales

El asentamiento urbano actual de la ensenada de Bolonia, el núcleo de El Lentiscal, muestra la singularidad de tratarse de un asentamiento tradicionalmente agrario, de pequeñas dimensiones. Recientemente, los procesos de crecimiento de nuevos usos turísticos van alterando la fisonomía de este paisaje urbano tradicional.

5.     La playa de Bolonia

Formada entre dos salientes montuosos, forma una playa de abundantes y finas arenas blancas que se continúa en potentes dunas. Uno de los valores de esta playa radica en el hecho de mantenerse en gran medida natural, no urbanizada al modo del paisaje de otros tramos litorales turísticos. Ese contacto entre el espacio rural y el mar es uno de los rasgos paisajísticos más destacados del lugar.

6.     Zona de matorral y pastizal

En las zonas más abiertas y de menor relieve, sobre materiales arcillosos, aparecen espacios desarbolados a consecuencia de la presión ganadera tradicional (el vacuno retinto). El matorral de retamas y lentiscos acompaña a los ricos pastizales de la zona 

 

 

Los roquedos desprovistos de vegetación coronan gran parte del cierre de la cuenca visual de la Ensenada respecto al entorno paisajístico
Los roquedos desprovistos de vegetación coronan gran parte del cierre de la cuenca visual de la Ensenada respecto al entorno paisajístico

Las ruinas arqueológicas de Baelo Claudia
Las ruinas arqueológicas de Baelo Claudia

El contacto de la duna con las antiguas masas de pino piñonero.
El contacto de la duna con las antiguas masas de pino piñonero.

Panoramica de las laderas que rodean la Ensenada
Panoramica de las laderas que rodean la Ensenada

En primer plano, floración en los pastizales salpicados de palmitos y ericáceas  que bordean el recinto arqueológico. Al fondo, el escenario de las laderas que enmarcan la Ensenada está dominado por masa de  pinares y algunos eucaliptos, como consecuencia de repoblaciones forestales del siglo XX.

Carmen Patricia Comino Ariza, Arquitecta de GRarquitectos & Miguel Angel Sánchez del Arbol. Geógrafo y Urbanista. Colaborador de GR-Arquitectos Asociados.

EL EROTISMO EN LA PREHISTORIA, EL ARTE Y EL PAPEL DE LA MUJER

«Noticias y actualidad»

Hoy os traemos a la Ciudad Comprometida una introducción a la sexualidad y el erotismo del ser humano prehistórico que tuvo su plasmación en arte como modo de expresión e implicaciones morales que han llegado incluso hasta nuestros días. La existencia de dos sexos no es lo más corriente entre los seres vivos. La mayor parte de las especies son asexuadas, reproduciéndose con gran abundancia aunque con menor variabilidad genética. El sexo posibilitó una rica diversidad y la creación de fuertes vínculos entre los organismos. Las sociedades del pasado pronto se apercibieron de las implicaciones reproductivas, sociales y simbólicas del sexo. A parte de su función como acto perpetuador de la especie, no siempre fue un acto de placer. Durante muchos años reinó el orden moral y sexual que ejercía una verdadera opresión sobre la vida privada. La procreación solo se entendía dentro de la pareja, con fines reproductivos y para asegurar la herencia y la filiación. El sentimiento amoroso va a la par con la consideración que se tiene por los muertos, con el sentido de la estética, características propiamente humanas solo desarrolladas por el hombre de «Cromagnon«.

Venus de Dolní Věstonice.   Fuente: wikipedia.org
Venus de Dolní Věstonice. Fuente: wikipedia.org

Haciendo un repaso por la Prehistoria, en el Paleolítico superior, hace unos 35.000 años, las sociedades humanas comienzan a plasmar por primera vez el sexo en imágenes. Las cuevas se llenan de signos asociados a la reproducción, y las composiciones parecen indicar un mundo visto como dualidad masculino-femenino.

Ya en el Neolítico, las figuras del arco mediterráneo nos muestran la nueva sociedad patriarcal y masculina. El poder es de los hombres y ellos ahora se muestran esquematizados con sus miembros destacados y protagonizando escenas de acción.

Las sociedades complejas del Neolítico avanzado y de la Edad del Bronce idealizan a la mujer con figuras que exaltan la fecundidad. Para el hombre, la procreación llega  a ser un ritual cargado de un erotismo-mágico, mientras que la mujer se transforma en Madre naturaleza, en un ser que tiene el poder de crear vida. La figura del “Chamán”, se convierte en el nexo de unión entre lo desconocido y la realidad, que, a través de la liturgia y el erotismo, llega a su máxima significación simbólica.

Venus de Laussel. Fuente: mec.es
Venus de Laussel. Fuente: mec.es

Las representaciones de la mujer, las denominadas “Venus”, son mayoritariamente esculturas. Por su forma tridimensional  fueron imágenes a las que se les rendía culto y se convirtieron en “objeto” transportable que podía adorarse “in situ«. La Venus es un ser mágico, es la  creadora y gracias a ella se  perpetúa la vida, es el eje principal de la comunidad pues alberga la vida en su interior.

Para algunos historiadores, la iconografía escultórica de las diosas madre es la coartada masculina para desplazar al sexo femenino, que desde entonces es el sexo débil”. Esta situación de consideración de la mujer como ser  inferior respecto al hombre se ha mantenido hasta el periodo contemporáneo, aunque lamentablemente aun en la actualidad existan sociedades donde dicho avance no se ha producido.

Desde este blog, como no podría ser de otra manera, abogamos por la plena igualdad de la mujer en todos los ámbitos de la vida, conscientes que siglos y siglos de discriminación no son fáciles de dejar atrás, pero como sociedad comprometida con la igualdad no podemos más que aportar nuestro granito de arena en este arduo camino. Con esta introducción a la sexualidad y el erotismo prehistórico pretendemos mostrar que esta situación de exclusión social de la mujer no es algo reciente, que no siempre fue así, que se retrotrae hasta nuestro pasado más remoto y se enraíza en nuestras más profundas relaciones humanas. Desde una visión actualizada, sin ataduras, debemos apreciar este arte primitivo como una muestra más de nuestra capacidad de expresar sentimientos y de reflejar la época de unos seres humanos no tan distintos a nosotros.

Si deseáis ampliar esta documentación sobre la simbología del erotismo de nuestros antepasados, podéis consultar ,entre otras, las webs la Fundación Atapuerca, o arterupestre-c.com

Jesus Maria Cuesta, arquitecto de GRarquitectos

EL ALCALDE DE BARCELONA PIDE UN ‘CARA A CARA’ CON GALLARDÓN PARA DEBATIR SOBRE SUS RESPECTIVOS MODELOS DE CIUDAD

«Noticias y actualidad»

Queremos compartir esta interesante noticia publicada en El País Digital que consideramos de gran interés por su actualidad. Ante la cercanía de las elecciones locales del próximo 22 de Mayo, el Alcalde de la cuidad de Barcelona, Jordi Hereu, ha emplazado a Alberto Ruiz Gallardón, Alcalde de Madrid, a debatir sobre los modelos de ciudad de ambas urbes.  Para el edil barcelonés, se diferencia de su homologo por el inferior nivel de endeudamiento mantenido en la entidad local catalana, así como por la ausencia de poblados chabolistas. Se plantea incluso que el  debate sea  televisado.

La presencia en la vida política de estos temas no es muy abundante y aunque sea en época electoral, se agradece que existan iniciativas como ésta que traten sobre cómo queremos nuestras ciudades y hacia que modelos queremos converger.

A la izquierda, imagen de Barcelona. A la derecha, Madrid
A la izquierda, imagen de Barcelona. A la derecha, Madrid

Pasamos a destacar algunos fragmentos de la noticia.

El vicealcalde de Madrid y jefe de campaña de la candidatura popular al Ayuntamiento de la capital, Manuel Cobo, que ha dejado la puerta abierta a este careo. «Valoramos todas las peticiones que nos hagan y las analizaremos. Pero creo que saldrías perdiendo, Hereu», ha avisado Cobo en declaraciones a la prensa (…)

En un acto en el barrio barcelonés del Coll, Hereu ha explicado que lo que pretende es «confrontar» dos modelos diferentes de construir ciudad: «El modelo conservador de Madrid y el progresista de Barcelona«. Hereu ha asegurado que el debate «sería bueno» para que se visualice «el modelo conservador, político y social de Madrid» frente al «mejor modelo progresista de construcción de una ciudad» que representa, a su juicio, Barcelona.

Posible debate entre Hereu y Gallardón
Posible debate entre Hereu y Gallardón

«Sería clarificador para el debate político, sería positivo e interesante para ver que hay dos maneras de construir ciudad y tienen resultados diferentes», ha señalado Hereu, en alusión al endeudamiento de Madrid, que concentra la mitad de la deuda de todas las capitales, frente a la solvencia económica del Ayuntamiento catalán de la que siempre presume.

Para Gallardón,»el progreso de las dos ciudades beneficia al conjunto de España» porque son «los grandes motores de la economía y del discurso cultural y social«. «Con toda sinceridad, ya me gustaría a mí que en el PP hubiera más gallardones», contestó Hereu.

Para acceder a la noticia completa, PINCHE AQUÍ.

SEMBRAR Y COSECHAR AGUAS

 «El Territorio Comprometido»

Hemos recibido en nuestro Blog un interesante comentario a uno de nuestros artículos sobre La Alpujarra, escrito por nuestro paisano y amigo Rafael Fernández RubioPremio Rey Jaime I a la Preservación del Medio Ambiente, y que posee además otra humilde distinción muy querida por nosotros: haber sido nombrado  Ciudadano Comprometido por este Blog… por ambas cuestiones, me ha parecido del máximo interés reproducirlo como hoy, para que no pase desapercibido y que podáis disfrutarlo adecuadamente. Ahí lo lleváis… y una vez más: ¡Gracias Rafael por ser como eres!

Hoy, “paseándome” por la Alpujarra, a muchos kilómetros de distancia, encontré esta blog del buen amigo y excelente arquitecto Juan Carlos García de los Reyes, y me interesó porque abordaba estas acequias tan queridas. Por ello, y aunque es largo, me permito copiar la Editorial que he escrito para el número de Marzo, de la Revista Tecnoambiente (ya en la imprenta), es otro modo de ver el papel de estas acequias.

Acequia de careo de Capileira
Acequia de careo de Capileira

Y animar quiero también, a los interesados en esta temática, a su adscripción en el Grupo de Trabajo que, a escala internacional, estoy montando a propósito de “sembrar y cosechar aguas”. Esta es la editorial:

SEMBRAR AGUAS

Lo hacían mis antecesores árabes en las Alpujarras, y lo hace quechuas y aymaras en los Andes, y lo hicieron sus ascendientes… y lo hacen himalayos y timorenses… y ahora, que vemos cómo se produce la recesión de los glaciares, tal vez se pueda pensar en retomar lo que la sabia cultura popular nos legó.

Los árabes, hace 1000 años (día más, día menos), derivaban las aguas de los barrancos y ríos alpujarreños, principalmente las de deshielo; y lo hacían por acequias, talladas en la roca y labradas en esa mínima franja de alteración, siguiendo curvas de nivel, y llegando con ellas hasta muy lejos… Debajo de estas acequias construían paratas para riego, con muros de piedra, para sujetar apenas unas estrechas lenguas de tierra, donde sembrar algo de huerta y algo de fruta. El riego se hacía (y se hace) por turnos, abriendo pequeñas compuertas para dar paso al agua, que fluía y fluye fugaz por surcos cavados entre caballones… y pasaba a la siguiente parcela, y a la otra… y donde no había tierra, para esa parata de primor, se plantaban castaños, que allí los debe haber de mil años (día más, día menos). Alguno de estos castaños me dijo que, a su regazo, se había sentado Abén Humeya, con alguna bellísima hurí (vaya usted a saber lo que hacían, mejor no preguntar…).

Paratas de cultivo en la Alpujarra
Paratas de cultivo en la Alpujarra

Y así fueron roturando aquellos bancales, en escalinata que sube ladera arriba, hasta las puertas del cielo. En la distancia el verdor marca esas líneas, que precursoras fueron de las curvas de nivel… son los denominados “careos” del agua.

Y derivando agua por ellos, y regando sus mini-huertos, y gracias a las muchas pérdidas, “sembraban aguas”, que nacerían, meses más tarde, en parto sin dolor, en manantiales estratégicamente ubicados en las partes bajas de las laderas, como aguas oligometálicas, prístinas, cristalinas, despertadoras de apetito para saborear un buen jamón, curado en Trevélez, con crujiente pan de hogaza, y un trago de vino, de la bota, que no desmerece al agua…

Manantial de aguas ferruginosas tributario de la cuenca del río Trevélez
Manantial de aguas ferruginosas tributario de la cuenca del río Trevélez

Pero llegaron ingenieros sabihondos, y aplicaron fórmulas (que es lo que saben hacer), y no miraron al suelo ni al cielo, sino al pliego. Y mandaron traer sacos de cemento, por las pinas veredas, y cuando se les acabaron trajeron más y más; y se tomaron un vaso de vino “costa”, criado en aquel terruño, y se fueron a sus despachos y despacharon presupuestos. Y hubo comisiones y oficios y hasta aquello de “cúmplase”…

Y aquellas acequias, ahora llevaban su néctar divino más lejos, y más regantes pagaban sus cuotas… pero aquellas acequias ya no filtraban, ya no recargaban, ya no daban savia a los castaños,… y los chorritos de agua ya no cantaba en sus manantiales; ni los jilgueros tenían umbría; ni los zapateros danzaban en los charcos de agua… Ya el bocadillo no se acompañaba del refresco del agua nacida en la nieve… Ya no se sembraban aguas, ya se secaban los suelos,… y los hidrogeólogos nos tragábamos las lágrimas con desconsuelo… mientras que los del cemento compadreaban satisfechos del entuerto hecho, y de que por las arcas pasaba el oro azul…

Y os contaría de las “amunas”, que es otro facer semejante de los indios peruanos o bolivianos, en su mejor aprovechar las aguas de deshielo, y os diría que, con la recesión glaciar, estamos volviendo a sembrar aguas en aquellas laderas andinas, por encima de los 4.000 m de altitud. Y os contaría que en los Himalayas se están “sembrando glaciares”, que es lo mismo pero aprovechando el permafrost,…

"sembrando" amunas, Fuente: ricardomarapi.blogspot.com
"sembrando" amunas, Fuente: ricardomarapi.blogspot.com

Y eso es lo que hoy este viejo maestro quiere alzar como bandera: ¡sembrar aguas! ¡Sembrar ilusiones!, mientras que en lo profundo rumio: Haz de la ciencia poesía, / de los sueños creaciones, / de los deseos ilusiones, / y de las aguas alegrías…

 Rafael Fernández Rubio
Premio Rey Jaime I a la Preservación del Medio Ambiente

POR TIERRAS DE GRANADA: EL MUSEO DE LA CASA DE LOS TIROS

Las Tierras de Granada, singular encrucijada como pocas, atesoran por ello una rica historia que se remonta miles de años y un atractivo mosaico de culturas, cada una de las cuales nos ha ido legando sus huellas… Materiales o inmateriales. Monumentos o costumbres populares. Bellas artes, música, poesía, artesanía, sitios históricos, paisajes naturales y rurales, arquitectura vernácula, ciudades monumentales…

Por ello, hemos pensado en La Ciudad Comprometida que será una buena experiencia compartir con vosotros un paseo por algunos de los más singulares museos y centros de interpretación (o equivalentes)  que poseemos, para animaros (animarnos) a visitarlos una vez más, y para agradecerles su contribución a la cultura…

Y para empezar, uno de los más extraordinarios museos: LA CASA DE LOS TIROS: bello edificio y un atractivo contenido que nos ayuda a entender la historia y las costumbres de esta tierra… Además, desde La Ciudad Comprometida aprovechamos para enviar a su director y a su equipo nuestro afecto y gratitud.

PRESENTACIÓN

El museo Casa de los Tiros nos invita desde su fachada a un paseo emocional por sus patios, salas y jardines, y nos propone una visión especial de la ciudad a través de sus fondos documentales (grabados, litografías, carteles, postales, prensa y fotografías). La Granada del siglo XIX se nos ofrece cargada de matices, dándonos la oportunidad de vivir aquella época a través de su mundo político, literario, artístico y festivo. En esta casa, como dice el lema de su fachada, “el corazón manda”.

Imagen de la fachada principal de la Casa de los Tiros
Imagen de la fachada principal de la Casa de los Tiros

EL EDIFICIO

Bello exponente de la arquitectura domestica granadina, conformado por tres plantas, patio central, pequeño patio secundario y jardín; cuya joya es el torreón, pieza que protege todo el edificio y a la vez lo oculta y que nos habla de la rica arquitectura civil del siglo XVI granadino.

Vista general de la Plaza Padre Suárez hacia 1940. Foto: Torres Molina
Vista general de la Plaza Padre Suárez hacia 1940. Foto: Torres Molina

El torreón, esconde y protege a la vez una organización doméstica muy meditada. Todo vivirá y respirará en torno a su gran patio central que es ordenado. Pero que recoge con exquisita sensibilidad el ritmo del arco de medio punto con los planos horizontales de largos maderos que se apoyan en zapatas. Y éstas a su vez, en columnas y capiteles aprovechados de viejas arquitecturas árabes.

El patio organiza el ritmo y la circulación del Museo distribuyéndose en tres plantas que giran entorno a él y se abren en ángulo recto al jardín, cerrando la manzana que lo integra por su lado Norte. En su lado Este, existe un pequeño patio interior que es medianería con una casa y que fractura la proporción de toda la manzana

EL MUSEO

ESCALERA PRINCIPAL: Una vez atravesado el zaguán accedemos al patio, lugar desde el que iniciamos la visita al Museo subiendo la escalera que nos lleva hasta la planta principal de la casa

Escalera Principal: Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Escalera Principal: Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

La escalera sirve de marco para la exposición de la llamada Colección Generalife, grupo de pinturas formado por diversos retratos de reyes españoles de la Casa de Austria.

LA CUADRA DORADA: Desde la escalera principal se accede a una estancia de paso que sirve de antesala al salón principal del edificio, la Cuadra Dorada. la sala más emblemática del edificio, con armadura renacentista que decora su techo y pinturas murales. Su nombre hace referencia a la abundancia de reflejos dorados de su alfarje o artesonado.

Imagen de Cuadra Dorada
Imagen de Cuadra Dorada

SALA I. EL PAISAJE: Muestra de diferentes representaciones tanto gráficas como literarias de la ciudad de Granada.

Vista general de la Sala El paisaje. Foto: J. Algarra
Vista general de la Sala El paisaje. Foto: J. Algarra

SALA II-III. ORIENTALISMO : Las dos siguientes salas nos aproximan a un fenómeno cultural de alcance europeo, fundamental en el siglo XIX, como es el orientalismo. Este tiene en Granada uno de sus referentes más significativos, gracias a la peculiar historia de la ciudad y la conservación de un edificio tan singular como la Alhambra.

Vista general de la Sala Orientalismo I. Foto: J. Algarra
Vista general de la Sala Orientalismo I. Foto: J. Algarra

SALA IV. LOS VIAJEROS: Gracias a su rico pasado cultural y a su proximidad geográfica, por su aspecto de otro tiempo y por su pasado islámico, la ciudad de Granada se convierte un lugar a visitar a finales del siglo XIX, pues La Alhambra y el resto de la ciudad, que aún conservaba su antiguo urbanismo, se convirtieron en uno de los grandes mitos del Romanticismo. Se recrea el ambiente que dichos viajeros podían encontrar al llegar a la ciudad.

Vista general de la Sala Los viajeros. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala Los viajeros. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA V-VI. ARTES INDUSTRIALES: Muestras de la cerámica de Fajalauza, producida en el barrio del Albaycín y pequeñas esculturas, popularmente llamadas «barros» destinadas a los viajeros y a la burguesía granadina.

Vista general de la Sala V: Colección de barros. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala V: Colección de barros. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA VII. COSTUMBRISMO: El costumbrismo del siglo XIX se centró en tipos populares como bandoleros, vendedores, y, sobre todo, gitanos del Sacromonte, puesto que era un barrio que resultaba especialmente atractivo a los viajeros y escritores de la época.

Vista general de la Sala El costumbrismo. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala El costumbrismo. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA VIII. SALA DE TRÁNSITO: Se abre a dos de los espacios más singulares de esta casa: su patio principal y el jardín. Se presentan algunas de las figuras granadinas claves del siglo XIX.

SALA IX. SALA ISABELINA: Una recreación ambiental del periodo isabelino, incorporando sillones, alfombras o mobiliario isabelino, convirtiéndola en una sala de época.

Vista general de la Sala Gabinete Isabelino. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala Gabinete Isabelino. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA X. LA MUJER GRANADINA Y LA CULTURA: La Emperatriz Eugenia y Mariana Pineda son los ejes en donde gira toda la poética en torno a la mujer de esta tierra.

Vista general de la Sala La mujer granadina. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala La mujer granadina. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA XI. LOS GRANDES ACONTECIMIENTOS DEL SIGLO XIX: Esta Sala se va a apoyar en el periodismo, que en el siglo XIX va a irrumpir con una fuerza sorprendente, poniendo las bases del principal medio de comunicación de masas. Servirá esa eclosión para que él mismo se vaya consolidando poco a poco.

Vista general de la Sala Los grandes acontecimientos del siglo XIX. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada
Vista general de la Sala Los grandes acontecimientos del siglo XIX. Imagen de la guía oficial museo casa de los tiros de granada

SALA XII. EL CARTEL. LAS FIESTAS EN GRANADA: El museo termina su visita dedicando la última Sala a las fiestas de la ciudad. Con el colorido de sus carteles, las curiosidades de sus programas y folletos y la referencia gráfica que nos da la selección de fotografías presentada, pretende que el visitante olvide la parte más amarga y conflictiva del siglo XIX.

Cartel de las Fiestas del Corpus, realizado por Isidoro Marín.
Cartel de las Fiestas del Corpus, realizado por Isidoro Marín.

Antes de concluir hay que hacer una breve referencia a su Biblioteca, Hemeroteca y Archivo, que constituyen lo que modernamente se ha denominado Servicio de Investigación. Tiene un uso mixto; por un lado incorporándolos a las exhibiciones permanentes y por otro, como fuente de investigación sobre los temas locales.

Estos fondos cuentan con un espacio concreto que alcanzó personalidad propia con la última restauración del edificio. No existen restricciones a la hora de la consulta más allá de las establecidas en este tipo de servicios.

ENLACES

http://www.museosdeandalucia.es/cultura/museos/MCTGR/

http://www.amigoscasadelostiros.org/

 BIBLIOGRAFIA

Museo Casa de los Tiros de Granada: Guía oficial. Francisco González de la Oliva e Ignacio Hermoso Romero, Consejería de Cultura de Andalucía.