Desde que hace un par de años nuestra Concejalía de Cultura apostara por el relato corto en la Semana Cultural, no han dejado de sucederse actos en los que este género literario ha estado presente en nuestro municipio. Y me atrevo a llamarle “género literario”, no sólo por tratarse de un género discursivo con una extensión limitada, sino porque autores como el que presentamos este jueves en Jun, Ginés Cutillas, han conseguido con la calidad y originalidad de sus escritos, que así sea.
Ginés Cutillas es autor del libro de cuentos “La biblioteca de la vida” y aparece en varias antologías de relatos y microrrelatos como “Ficción Sur” y “A contrarreloj”. Está a punto de publicar su primera novela “La sociedad del duelo” y su primer libro de microrrelatos en 2009 en la editorial Cuadernos del Vigía.
Entre sus galardones se encuentran el Premio Internacional de Minicuento “El Dinosaurio 2007”, la V edición del concurso de microrrelatos de la “Feria del Libro de Granada 2006”, la VI edición del concurso de relatos de la “Fundación Drac 2007” y la I edición del Concurso Internacional de Microrrelatos “Literatura Comprimida 2006”.
Es colaborador en revistas literarias como El Oteador de los nuevos tiempos, Prometheus, Spejismos, En sentido figurado o Papelas de humo y crítico literario en La Opinión de Granada.
Desde esta bitácora virtual, os invito a participar en este encuentro tan real como los propios escritos de Ginés Cutillas, a caballo entre la realidad fantástica y lo onírico, que a buen seguro, os dejarán huella.
Para abrir boca, os dejo un par de microrrelatos del autor:
La extraña
Me he despertado al lado de una extraña. Aunque lo realmente fantástico es que cada vez que parpadeo aparece una mujer distinta.
Ahora sólo pienso en la manera de mantener los ojos abiertos el día que vuelva a aparecer.
Nota de despedida
El reloj se clavó a las 3:45 la noche que murió mi padre. Se volvió a parar el día que me despidieron (11:05 de la mañana); la noche que me abandonó mi primera mujer (2:40 de la madrugada) y el día que sufrí el accidente de tráfico (7:45 de la tarde).
Cada vez que sucede una desgracia, las varitas se detienen por unos días en el momento exacto en que acontece.
Pero es ahora, desde que estoy contigo, que el reloj ha comenzado a marchar hacia atrás.