Sábado noche es un cuadro que surgió al borrar con disolvente universal y pintura de tráfico un intento de paisaje con perros. Sobre el lienzo pegué una mácula de imprenta y dibujos de las chimeneas de una fábrica y de un taxi de Nueva York. Sobre ellos un ave rapaz, pintada con óleo y plumas verdaderas, cae en picado tocando con su ala el peinado en relieve de un “elvis” de oro dispuesto a comerse el mundo.
Mi primera experiencia internacional fue en la Selective Brusssels Art Fair de 1989, en la que compartí stand con la escultora Carmen Osuna. No recuerdo cuántos cuadros llevé ni cuantas esculturas había, pero el conjunto daba una imagen muy sólida, tanto que la foto de uno de mis cuadros apareció en la primera página de los periódicos anunciando la inauguración de la feria. Estos son algunos de los allí expuestos.
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Sábado noche (1989) T/M sobre lienzo. 200 x 200 cm.
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Días de playa (1988) T/M sobre lienzo. 230 x 200 cm.
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Sin título (1988) T/M sobre lienzo. 240 x 200 cm.
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