Buenas, soy Emilio. Ha llovido y las dehesas extremeñas están preciosas. Tengo una agenda muy agitada. Esta mañana he hecho un video chat en la web del diario Hoy: hoy.es. Ha estado muy bien. Ha participado mucha gente y se han quedadon preguntas sin contestar. Echarle un vistazo, porque me ha preguntado por todo. Hasta por la huelga de jueces: yo aún no he pensado lo que haré. Lo que sí sé es que un viernes de junio, cuando ya han empezado los turnos de vacaciones, no parece la mejor fecha del mundo. Si fuera un lunes…
Pero vamos a lo nuestro, que no hay demasiado tiempo. Alguien me pedía mi opinión sobre la Educación para la Ciudadanía. Yo no la veo necesaria. Creo que debe haber algo de Ciudadanía en todas y cada una de las asignaturas que ya existen. Pero ya que está, lo que puedo decir es que me parece fatal que los unos y los otros la usen en la batalla política. Lo que tienen que hacer los partidos mayoritarios es llegar a un pacto por la educación de una vez por todas.
Mañana, a las cinco de la tarde, estoy en un hotel de Coria (Cáceres) y a las ocho de la tarde, en el Instituto Gregorio Marañón, de Caminomorisco. Y el día 15 tengo dos citas en Villanueva de la Serena, ya en Badajoz, una por la mañana y otra por la tarde, pero ahora mismo no recuerdo las horas. Entre una y otra, la televisión de Extremadura quiere hacerme una entrevista. Como siempre, estoy alucinado por el interés de las personas que vienen a mis conferencias y lo amable que es la gente conmigo. Gracias a todos por dedicar unos minutos a escuchar o leer a este juez de infantería. Un saludo.
¡Hola, otra vez! Soy Lola C., sí, la misma Lola que preguntó por los derechos de los detenidos cuando son menores de edad (por cierto que aún no he encontrado nada divulgativo en la red, pero sigo en ello). Imparto este curso por primera vez una hora semanal de Educación para la Ciudadanía, y me está sorprendiendo muy gratamente.
No entiendo cómo se genera tanta polémica por una hora semanal de esta materia que lo único que pretende es enseñar a los chicos y chicas los valores en los que se fundamenta este estado de derecho en el que convivimos, llegándose a manifestaciones en la calle o a impartirla en inglés, cuando se imparten dos horas semanales de Religión y Moral Católica, creencia de una parte de la población de este país, y algo perteneciente al ámbito privado.
Estoy un poco cansada de que se hable y se hable sobre el fracaso escolar, y en lugar de eliminar el adoctrinamiento religioso (de cualquier religión) de las escuelas públicas de un estado aconfesional como el nuestro, y ocupar ese espacio horario en otras materias de interés para todo el alumnado y no sólo para una parte, lo que se hace es cargar contra una hora semanal que pretende enseñar qué significa ser un buen ciudadano, la necesidad de cumplir la ley, los mecanismos e instituciones que conforman nuestra sociedad, etc., etc…
Además, el sistema castiga al alumnado que no elige religión a permanecer esas dos horas en los centros sin poder trabajar ningún contenido (conceptual, procedimental o actitudinal) que tenga algo que ver con la etapa educativa que curse. Ya me dirán ustedes si esto no es una soberana estupidez. Tengo alumnos con deficiencias o problemas con algunas materias, que pertenecen a otras religiones, pero a los que la ley me impide ayudar en ese tiempo, porque esa ayuda puede suponer una ventaja frente a sus compañeros católicos. Nadie sale a manifestarse por esto.
Emilio, discrepo contigo cuando dices que algo de ciudadanía debe haber en todas las materias. La realidad es que no la hay. Las demás materias tienen bastante con lo que les toca. Una cosa es que si surge una situación cualquier profesor/a se detenga a educar, recordar normas o valores básicos, y otra cosa es tener un espacio para tratar de hacer comprender al alumnado los derechos y obligaciones que conlleva el ser ciudadano en este país.
Esto lo he comprobado en mis clases: mis alumnos saben de memoria los derechos de los detenidos de las películas americanas y desconocen los derechos de los detenidos en España. Creen que los juicios son tal y como los ven en las series de televisión, etc.
Si seguimos así, además de celebrar Haloween, que ya se está haciendo en muchos sitios, vamos a pasar al día de Acción de Gracias y al 4 de Julio.
Estoy más con Lola que con el juez. Cuando se habla de que estamos en una sociedad que ha perdido los valores básicos y donde cada uno va a lo suyo, Ciudadanía debería ser una auténtica terapia educativa, nunca una realidad bajo sospecha. Yo he pedido dar el año que viene Ciudadanía en mi colegio de Primaria y pretendo hacerlo para demostrar que los recelos de un sector social muy concreto, son injustificados y absurdos. Este sector, capitaneado por la jerarquía católica, ciertos medios y orquestado todo por el PP, se ha pasado bastante en sus acusaciones.
Como Lola, no veo ningún adoctrinamiento en trabajar didácticamente una serie de valores tan universales que no tendrían que levantar estas interesadas sospechas. Si un profesor desea adoctrinar a sus alumnos, tiene miles de horas para hacerlo. Para adoctrinamiento el católico, el de la antigua Formación del Espíritu Nacional. ¿Por qué no protestó nadie entonces? ¿Para dónde miraban los obispos? ¿De qué se ocupaba la COPE en esa época?
Rigoletto
Si hay algo en lo cual nunca se pondrán de acuerdo aquellos partidos que gobiernen es en educación y creo que puedo aclarar el por que.
La educación es la forma que tienen los poderes publc
sorry sigo:
… los poderes públicos de reproducir la ideología, sea esta la dominante o no, por eso ahora con Bolonia están quitando las materias teóricas y solo están dejando las practicas para que seamos personas que solo sirvamos para trabajar y no para opinar de política(por ejemplo) con argumentos.
Es una manera de debilitar los movimientos sociales, hoy casi desaparecidos. Todos los que lleguen al poder intentarán poner su modelo educativo, la desgracia es que el modelo PSOE y PP son similares, buscando perpetuar los sistemas de producción actuales.
Perdone la rapidez del comentario. Saludos!
Un placer leerlo Don Emilio. Ya me hubiera gustado a mí encontrarme un profesor como usted en la Universidad… (Bueno, creo que tuve uno,…) 😉
Da gusto leer a gente como usted y como el Sr. Morán. Muy didáctico y muy actual.
Un saludo.
Pero porque no dejais de una vez en paz a los catolicos, es que es como si fueramos unos invasores, cuando aqui en España el 90% está bautizado. Y ya es de risa que se siga nombrando lo que había hace 40 años, hay que mirar lo que hay ahora, los que mandaban en aquella époco la mayoría ya ni estan, y por cierto la COPE hacía exactamente lo mismo que la SER.
Yo soy profesora de Educación para la Ciudadanía. Si bien es cierto que los contenidos de la asignatura son transversales y, por lo tanto, objeto de todas las materias, resulta estimulante para los alumnos y para mi que no haya otra materia «importante» que dejemos de lado durante una hora o dos a la semana para conversar sobre, por ejemplo, como funciona el sistema judicial de nuestro pais.
Entender qué es la responsabilidad civil, qué diferencia hay entre imprudencia temeraria con resultado de muerte y asesinato,por qué es distinto chocar contra un murciélago o contra una vaca con el coche (parece de broma, pero al parecer, son asuntos importantísimos para mis alumnos de 13 años), por qué debemos agradecer tener sanidad para todos y cómo debemos usarla responsablemente, qué es un Ayuntamiento, a qué se dedica el Defensor del Pueblo, cómo podemos reclamar en un Instituto de Secundaria, qué hacer si somos objeto o testigos de violencia doméstica, quién paga la recogida de basuras, por qué todas las personas son respetables (pero no todas las opiniones), qué es la diversidad cultural, en qué consiste la empatía, como podemos ser solidarios, qué es la ONU, por qué hay ONGs, por qué los padres prohiben cosas, por qué los hijos necesitan su espacio….
Tengo 110 minutos semanales para todo esto y mucho más…Todo lo que necesitemos mis alumnos y yo. Respeto por la diferencia, tolerancia con la falibilidad humana, diálogo como instrumento, justicia exigente, derechos universales e irrenunciables…Estas dos clases a la semana son un auténtico placer para nosotros, mis alumnos y yo.
Bueno, es cierto que hay una gran cantidad de población bautizada. Pero digo yo que, si lo normal es pedir el consentimiento, y el bautizo se hace al escaso tiempo de nacer, ¿cómo diantres se le pide el consentimiento a un recien nacido? Yo no tengo nada en contra de las enseñanzas religiosas, de hecho me parece que el catolicismo actualmente se ha convertido en una religión perseguida. Pero las cosas como son, no por ser bautizado con escasos días de vida uno es católico. Yo por lo menos fui bautizado, y desde mi más firme creencia tengo muy claro que Dios pasa 4 pueblos de nosotros, o que se divierte como un enano viendo como nos hacemos la puñeta, así que desde luego no estoy dispuesto a profesarle ninguna devoción. Aunque insisto, esa es mi postura desde mi fuero interno; a nivel externo los cristanos gozan de mi mayor respeto y como digo tampoco me parece justa la caza de brujas a la que parecen estar sometidos actualmente.
Nada más lejos de mi intención que no “dejar en paz a los católicos”. Los católicos no son víctimas ni están siendo perseguidos de ninguna manera, entre otras razones porque son mayoría en este país, al menos, los bautizados. La cifra de no practicantes es más difícil de averiguar. En este país hay una mayoría católica, pero también hay españoles de otras religiones y españoles que no profesan ninguna religión. Todos merecen el mismo respeto, porque el respeto no es cuestión de cifras.
Nadie cuestiona el derecho de las familias a elegir una formación religiosa, del signo que sea, para sus hijos. Pero lo que sí se cuestiona es que ese derecho deba ser satisfecho en la escuela y en horario escolar. Máxime cuando el adoctrinamiento moral es una responsabilidad de las familias, como bien afirman los que atacan a materias no doctrinales cono Educación para la Ciudadanía.
También hay familias que eligen una formación en música, idiomas, pintura o deportes más profunda que la que se imparte en la escuela y llevan a sus hijos a actividades fuera del horario escolar. La misma opción tienen las familias que quieran una formación religiosa, dejándola, además, en manos de los verdaderos profesionales, los ministros acreditados, y en el lugar adecuado, la iglesia, la sinagoga, la mezquita,…
Lo que no es de recibo es que no se respete el derecho a recibir formación en horario escolar a aquel alumnado que no elige la religión y, además, se les impida recibir ninguna formación curricular, aunque tampoco se les permita irse a su casa. Sería interesante observar cuantos en esas circunstancias seguirían en religión.
Muy poca caridad cristiana demuestran estas actitudes.
En España cuando dije que el 90% estan bautizados, también podía haber puesto que toman la comunión, se casan por la Iglesia (esto queda muy bonito, con toda su parafernalia) y ya no digamos cuando alguien se muere, en el funeral reza todo el mundo, digo yo que será por «si las moscas», en conclusión, o en España hay mucho creyente o somos de lo más hipócritas.
Pues, aunque sea el 90%, hay que respetar al otro 10% de españoles, que pagan los mismos impuestos que los demás. Y, una cosa más, me parece muy importante mantener separadas las creencias religiosas personales y privadas de las decisiones públicas y políticas que todos debemos respetar. A la vista tenemos las consecuencias de confundir Estado y religión. No, gracias.