Hola, soy Morán. Me cuentan los que entienden de esto de Internet que el otro día batimos, entre todos -vosotros y nosotros-, el récord de audiencia de este blog con unos cuatro mil usuarios únicos. Según los que entienden, es un mogollón. Todo se debió a que uno de las ‘entradas’ entró, valga la redundancia, en ‘meneame’. Sorprendente el mundillo este, ¿que no?
Bueno, a la que vamos. Se queja Centinela de que el blog es una especie de ‘Herodes’ que se dedica a criminalizar a los menores de edad. Respeto su opinión, pero no creo que tal cosa esté ocurriendo. En cualquier caso, le recuerdo que en ‘Mis sentencias Ejemplares’ se repite más de una vez y de dos, que los niños, independientemente de lo que hagan, también siempre son víctimas. Siempre.
Además, don Emilio no se cansa de repetir que no hay que endurecer las penas para los menores infractores, que están bien como están. También se opone a bajar la edad penal y siempre invita a los políticos a visitar un centro de internamiento de Menores para que vean que no es precismente una guardería. De él es la frase que sigue: «Cuando se cierran las celdas y se apagan las luces en un correccional, se oye a los niños llorar. Allí no hay violadores, ladrones o asesinos… Sólo hay niños que lloran».
Un saludo a todo. Y lo de siempre. Intentamos contestar a todos, de verdad. Pero es complicado.
Deja un comentario