Lamentablemente el menor es negocio, un gran negocio diría yo, y prima el interés económico por encima de cualquier otra consideración. Desgraciadamente es así. Hace una década, en el juzgado hicimos una lista de bares que vendían alcohol a menores en Granada. Nos ayudaron los propios chavales que pasan por el tribunal. La lista era larga: más de veinte locales. Después de conocer la denuncia de esta madre contra una discoteca, una idea que aplaudo y apoyo, observo que las cosas no han cambiado, que hay que seguir insistiendo en este tema, que es serio.
Ahora mismo, esta práctica es una infracción administrativa que contempla multas que pueden llegar, y hablo de memoria, hasta los 600.000 euros, que sería un castigo suficiente si se aplicase, pero no se aplica o se aplica poco. No parece que haya voluntad política. Y al establecimiento le interesa que sea un asunto administrativo, porque, entre recurso y recurso, sigue haciendo caja. Y luego igual sólo tiene que pagar una multa de 300 euros. Le compensa. A lo mejor había que ir pensando en hacer alguna modificación legal para penalizar la venta de alcohol a menores.
La Ley Orgánica de Protección del Menor nos obliga a todos a velar por ellos y, cuando se vende alcohol a chicos de quince años, no se está cumpliendo. Las autoridades tienen que actuar. Está claro. No puede primar el interés económico por encima del interés del menor.
Bueno, el debate está lanzado. Como siempre, esperamos vuestras opiniones. Un saludo.
Excelente decisión la de esta madre por denunciar a la discoteca que vendía ilegalmente alcohol. Los jóvenes son blanco fácil y medidas de estas deberían de ocurrir muchas más veces
Si todos los padres hubieramos denunciado en su día…pero todos..denuncia trás denuncia, sin parar, seguro que se lo hubieran pensado más. Pero no lo hacíamos, supongo que como hacen ahora, por no meterse en follones, ni complicaciones, nadie hace nada. Nos rasgamos las vestiduras, pero nos quedamos en casa esperando que lo hagan los demás. Olé por esta madre, ojala yo hubiera hecho lo mismo…Y ya ni hablar de esos sitios en los que se sabe que se vende droga y ahí siguen, sin que nadie les toque un pelo…
Aplaudo igualmente a esta madre; pero también aprovecho para quejarme de los municipales que hacen la vista gorda en los botellones… compra el grande y beben todos! Esto sucede, además de en otros sitios, en pleno paseo marítimo de Palma de Mallorca, todos los fines de semana…
Un abrazo y felicidades por el blog.
los padres no pueden ya con sus hijos, e intentan culpar a quien sea por lo que ellos no han conseguido y si pueden sacar dinero y
fama por lo que ellos han echo mal mejor, así se sentiran mejor
y no culpables porque saben que es un problema de educacion y
tiene su origen en casa. Dejemos de buscar culpables fuera de casa
y eduquemos mejor a nuestros hijos.
Verdad es que te puedes pasar toda la vida educando y aconsejando a tu hijo sobre las consecuencias del consumo de alcohol y drogas, para que luego aparezcan esta gente sin escrúpulos que lo que les importa es llenar la caja y echen por tierra el trabajo de tanto tiempo. Luego están también algunos amiguitos que con decir «no seas un pringao» intentan convencer al resto para que caigan en estas cosas. Yo pienso que la solución estaría en trabajar todos a una, primero los padres, que somos fundamentales en la educación de nuestros hijos, pasando por educadores, policías, jueces y políticos, y sobre todo que las sanciones se endurezcan y se cumplan sea quien sea el responsable.
En este país todo se soluciona con denunciar, pues no.
¿Por vender una cerveza a un chico de 17 años 600.000 euros? Veo que queda poca gente con cordura en este país.
tu hijo no va a ser menor de edad toda la vida. Es tu hijo quien pide el alcohol, nadie le obliga a beberselo. Es quien ha entrado en un lugar sabiendo que es para mayores de edad y esta bebiendo algo que sabe que no puede y no podemos pretender que los camareros sean policias.
Me gustaría saber si estamos hablando de un menor de 11 años o de uno de 17. NO estoy de acuerdo de que si se pide una copa en una discoteca TODA la culpa es de la discoteca.
Por el amor de dios, mal está que la discoteca le suministre alcohol, pero el «pobrecito» chaval no está libre de culpa, a menos claro está, que el dueño de la discoteca le hubiera obligado a pedir y supuestamente, beberse la copa.
Estoy harto de ver a niñatos y niñatas de 14 años fumando a las puertas de los colegios, haciendo pintadas en las paredes y bebiendo los fines de semana. Los padres, que pasan olímpicamente de ellos, luego se echan las manos a la cabeza y culpan al mundo entero cuando su hijo cruza la puerta de casa a las 5 de la mañana borracho como una cuba. Joer, pero que te pensabas que estaba haciendo tu hijo a esas horas? estudiando en la biblioteca?
Yo también he sido menor de edad, también he ido a discotecas y también he bebido alcohol. Pero mis padres me dejaron muy clarito que el único responsable de mis actos era YO, y que toda acción conlleva una consecuencia… y joder, funcionó.
Es que como sigamos por ese camino que será lo próximo, demandar a los padres del chaval que ha dejado embarazada a mi niñita? demandar al chaval que ha pasado un porro a mi hijo? demandar al gobierno por no prevenir que mi hijo cometa un delito?
Menos demandar y más educar
La sociedad en el fondo no se quiere preocupar de los jóvenes, solo hay que ver los institutos con padres que ni se pasan or ahí ni para hablar con el tutor.
Desde luego, el gesto de la madre es loable. De hecho, es un ejemplo que todo padre o madre debería tener presente.
Con respecto al tema de la educación, y los esfuerzos que se hacen por que los jovenes sigan las pautas que los padres les indican al respecto… quizás no se haga adecuadamente: cuando se inculcan unos valores adecuadamente, estos prevalecen sobre los «no seas un pringao», sobre los «venga, que no pasa nada» y todo eso… Cuando un hijo se salta a la torera todo el esfuerzo de sus padres al respecto, es porque este esfuerzo no se ha dirigido en la dirección adecuada. Quizás sería mas efectivo que los hijos superan que todo se puede usar, si no se abusa de ello.
No podemos pretender que los hijos no hagan cosas que la mayoría de nosotros hacemos habitualmente (o ¿qué padre no se toma una cañita cuando sale los fines de semana con la familia, o quizás una copa de vez en cuando?). Sólo con el hecho de prohibir algo, o de mostrarlo como algo muy negativo y que no se debe hacer, ya hace que un joven tome interés en ello. Quizás si todos fuese explicado, antes de ser prohibido, ese interés sería menor.
Lo que está mas que claro es que los hijos, previamente a que se vean con una droga delante, y con la opción de tomarla o no, deberían de tener toda la información posible, y si está ha salido de los padres, mejor, porque por lo menos en caso de que la consuman cabe la posibilidad de que el hijo lo trate posteriormente con sus padres, sin ocultarlo (como suele suceder), lo cual puede ayudar a redirigir la situación en caso de ser necesario.
Quiero dejar claro que yo no soy padre (de momento), pero también que estas cosas me preocupan, porque las veo casi a diario, y porque ahora (que no soy padre) tengo una perspectiva distinta que creo que puede resultar interesante y efectiva. Tengo muchos amigos y familia que han caido en la droga, y siempre han acudido a sus familias cuando ya estaban casi en fase terminal… y esto no debería ser así: se puede cortar mucho antes, aportando los conocimiento y las experiencias que tienen los padres.
Con respecto a penalizar el suministro de alcohol a menores, me parece totalmente adecuado, y votaría por ello.
Poca educacion tendra un niño al cual sus padres le dan 50 euritos por fin de semana, con lo cual aprende bastante poco sobre el coste de ganarlos y va muy muy predispuesto a caer en esa tentacion que le ofrecen los malvados dueños de las discotecas, luego ademas el niño se queda en la discoteca gozando del permiso, o mas bien pasotismo de sus progenitores hasta las 7 de la mañana con lo cual le da tiempo para beberse el agua de los floreros. Pero claro estas condiciones previas a la salida de un menor al mundo nocturno no se tienen en cuenta y es mas facil tener contento al niñito y culpar a los demas. De acuerdo que las leyes hay que cumplirlas y a raja tabla ademas, pero tambien hay que colaborar todos en favorecer el cumplimiento.
No me lo puedo creer.
Acaso esta no es una tarea de los padres? El de educar a sus hijos?
Las generaciones de hoy en dia (15-20 años), tienen unos padres modelo, en sus respectivos trabajos, pero creo que hacen novillos en casa.
Ahh y no tengo 50 años ni 40, tengo 30.
Verdaderamente creo que mucha gente debe tener clases de: » Como educar a mis hijos, sin dejar que Ley Orgánica de Protección del Menor lo haga por mi »
Madre mia, gracias por haber estado educando toda tu vida!
Quiza deberian preocuparse mas los padres por dar una buena educacion a los hijos, en vez de tirar a lo facil que es perseguir y prohibir.
Otro punto seria revisar la edad legal para beber.
No veo que sea para tanto que un chaval se tome unas copas un fin de semana antes de cumplir 18.
No veria normal encontrarme niños de 13 de años borrachos como cubas un fin de semana, pero me remito a lo dicho, que se preocupen mas los padres por educar sus hijos y hacerles ver que hay bastante diferencia entre tomar algo un fin de semana y a acabar arrastrandose por el suelo.
Ya puestos podiamos subir la edad a 21 como en USA.
Que conseguiran con tantas multas? lo mismo que en USA. O que se empiecen a falsificar carnets a diestro y siniestro o que los chavales de 21 compraran con su carnet bebida y se iran todos a beber o a la calle o a «fiestas privadas».
Vaya por delante que apoyo totalmente a la madre y que estoy totalmente en contra de vender alcohol a menores.
Otra cosa es que la realidad como casi siempre vaya por delante de la ley, soy Ingeniero Informático y me he costeado la carrera trabajando como camarero de discoteca y puedo decir que me extraña mucho que sean sólo veinte locales los que venden alcohol a menores en Granada. Yo creo que en todos los locales se sirve en mayor o menor medida alcohol a menores. En ningún sitio se pide el carnet de identidad a todos los clientes sospechosos de no llegar a los 18 años, tan sólo cuando llega algún niño muy niño, es decir de menos de quince años, no se le sirve, pero a casi todos los jóvenes de entre 15 y 18 no se les ponen reparos, porque francamente aparentan todos más de 20 años y no hay tiempo de pedir el carnet a todos los clientes, un impedimento que puede parecer banal pero que esta ahí.
Yo no era el dueño del negocio, sino un simple trabajador, y me consta que mi jefe se desvivía por evitar estas cosas, pero al final las prisas de los camareros y las falsas apariencias de los menores hacen que se les sirva alcohol de manera sistemática.
En mi opinión es un problema bastante complicado de erradicar en la práctica, hay una cultura de beber todos los fines de semana tan extendida, que ya no se contempla salir sin tomarse dos o tres copas, se tengan 18 o se tengan 16.
Como conclusión, muy personal, sigo pensando que si bien la ley debe de ser el soporte en el que se basen todas las actuaciones legales, son los padres y no la ley los que se tienen que ocupar de que sus hijos no beban o no se droguen, unos padres bien informados de los peligros que acechan cada noche, valen más que todas las leyes que se puedan promulgar, pero echarles la culpa a otros siempre es fácil.
Enhorabuena por el blog y un saludo.
Por favor, en cualquier caso nadie le obliga a beber, y si no se lo dan en esa discoteca se lo darán en otra, y apuesto a que el chaval tampoco es tan inocente, seguro que usó mil trucos para parecer mayor de edad. Yo eso hacía. Estoy seguro de que la madre pilló borracho al chico y este se inventó cualquier tontería relacionada con la discoteca como excusa. ¿quién no lo haría con 15 años? Me recuerda a las tontas excusas que solíamos usar todos: «Este tabaco es de un amigo, que se lo estoy guardando.» «Sólo he tomado unas cervezas, pero me han sentado mal…» y cosas del estilo.
Si el chico quiere beber, nadie le va a parar. No es cuestion de ir denunciando por ahí a todo los bares/discotecas. Es sólo que los padres preferimos creer qe nuestros hijos son unos santitos inocentes y los gerentes de las discotecas unos despiadados que buscan pervertir a nuestros niñitos. Señora, abra los ojos y deje de ver a su hijo como un inocentón chiquillo. Con la edad qe tiene estoy seguro que ya se emborracha todos los findes, fuma porros y seguramente haya empezado a coquetear con pastillas o rayas.
A mi me sigue sorprendiendo siempre, que la gente se rasgue las vestiduras con el alcohol a menores, cuando lo que menos hacemos es predicar con el ejemplo…
Todo el mundo bebe en la calle, todo el mundo bebe en las comuniones, todo el mundo bebe en las bodas, beber esta bien visto en general y luego queremos que los menores no beban, confiando en que son tontos por naturaleza y se van a dar cuenta de que como son menores no pueden beber.
Al final, siempre queda la denuncia, que pague el pato el listo de turno, pero nunca la sociedad, el menor, los padres que deberían educar, las administraciones que deberían de proporcionar otros tipos de ocio y velar por la protección del menor, las ciudades que deberían acoger a los menores en lugares donde exclusivamente no se haga negocio con ellos ect…
Por supuesto que apoyo que no se de bebida a menores, pero me parece que muchas variables fallan y al final aplaudimos que el cabeza de turco se lleve la torta…Me acabo llevando la sensación de que esto es solo un parche, que servirá de ejemplo represivo, pero poco mas.
Quizás una gran parte de los padres ni se planteen el denunciar porque no ven nada extraño en que sus hijos beban con 16 años. Yo con esa edad bebía -y me emborrachaba-los fines de semana con total conocimiento y aceptación por parte de mis padres y como yo muchísima más gente.
La verdadera cuestión es si debe -o más que debe si es lícito- castigar -ya sea penal o civilmente- una actitud bien vista por gran parte de la población.
Claro, es más fácil denunciar a un desconocido que educar a tu propio hijo. No consumí alcohol en grandes cantidades hasta los 20, y sí, frecuentaba un bar que vendía alcohol a chavales desde los 16.
Cómo se consigue educar a un chaval? Restándole importancia al asunto. El alcohol está en las manos del hombre desde, prácticamente, siempre. No tiene nada de secreto, ni esotérico, ni que los niños considerarían como mágico y desconocido. La mejor manera de hacer que un adolescente haga las cosas cuando se supone que está preparado es mostrándole que no se lo estas prohibiendo por que sí, confías en él. Resumiendo, que si a los 16 no estaba por el suelo vomitando y completamente drogado fue porqué yo lo elegí (supongo gracias a una educación consistente).
Repito, me parece una barbaridad delegar la responsabilidad paternal a las autoridades.
Emilio, te escribo desde Chile y antes que nada enviarte un saludo por tu trabajo con la infancia y juventud. Yo soy educador popular y trabajo con niños de sectores pobres de mi país y veo que a pesar de haber un océano entre tu país y el mío, los problemas y las erroneas respuestas de la sociedad, pues son las mismas.
Aquí también tenemos el lío de la venta de alcohol a menores aceptado por los propios padres que envian a sus hijos a comprarles cervezas a la botilleria con el dependiente, que feliz, se las vende. Mal ejemplo de una sociedad que hace difícil el trabajo con los niños y niñas.
Me ha gustado tu blog y espero seguir participando desde un lejano país. Saludo a tí y a todos los que comparten la preocupación por la educación de infancia.
Como madre de cinco hijas ya adultas, recuerdo el período de su adolescencia como una etapa durísima. Creo que no hay sensación más reconfortante que la que sentía los viernes o sábados por la madrugada cuando oía llegar a la última de ellas a casa. Esperaba un rato y luego iba a darles un beso de alivio/cariño.
Fueron educadas con libertad-responsable (si existe tal cosa a esas edades) y mucho cariño y TODAS POR IGUAL. Sin embargo, no todas se comportaban igual ni eran igualmente responsables. Incluso hay una diferencia entre las mayores y las menores que es paralela a los cambios que vivió la sociedad en esos años.
Es imposible (y no estoy segura de que sea lo más recomendable) proteger a los hijos de todos los peligros. Tenía un amigo que decía que se conformaba con que sus hijos bebieran, pero lo justo, f…aran pero con precaución, fumaran, pero poco…
Lo que sí está claro es que no es igual el cerebro o la fisiología de un niño/niña de 13 años que el de alguien de 17 o 18. Y ahí sí, creo la ley debe ser estricta.
Una delicia su blog, Don Emilio.
¿LEYES PARA LOS MENORES?
Hola,Buenas tardes a tanta gente como nos encontramos en este blog,pero me gustaria hacer una pregunta abierta y si alguien me sabe responder todo sera mas facil…
*¿un menor de edad no tiene hora de recogida para estar en casa?
*cuando un menor hace algo(destrozo)quien se responsabiliza,los padres o el lugar donde haya hecho el «destrozo»?
Pienso que el caso no es de que no le haya sabido educar sino que lo dejo d hacer!ya que segun decia llevaba 5 meses vigilando al hijo,porque no has estado en casa con tu hijo menor de edad?un menor de edad tiene tanto dinero como para costease salir cada sabado y coger una «pea»?tal vez tu le proporcionaras el dinero,y si desde el primer mes viste donde iba…
¿por que no se lo prohibio?
porque no dejo de darle dineros para salir?
bueno me parece lamentable la actitud de esta madre. me parece estupendo k se preocupe de su hijo, pero a demostrado k no lo ace ni aora denunciando ni antes, pork ella es la k deberia de controlar a su hijo y no dejar a un chaval de 16 años asta deshoras en una discoteca y en cualquier discoteca pueden colarse algunos menores bien por un despiste de los vigilantes o bien por trampas de los propios menores ya con dnis falsos o con infinidad de cosas. en resumen no creo que toda la culpa sea de la discoteca tambien de la madre por descuidar a su hijo sabiendo k andaba en esos ambientes. un aplauso en la cara de daba yo a algunillos….
No me lo puedo creer, en casi todos los comentarios los culpables son los padres…no lo entiendo, se habla de que beben porque no se les educa. Pero alguién sabe lo dificil que es responsabilizar a tú hijo cuando sale de casa diciendole que la bebida es mala?, pero no se piensa que fuera de casa hay mil personas sin escrupulos que por dinero vende lo que sea y que los padres no podemos hacer nada?…No es que beban a las 4 ó 5 de la mañana, es que por la tarde ya les están vendiendo lo que quieran. Y con respecto al dinero, para coger un «pedal» no hacen falta 50 euros, con 10 simplemente, te pones de vino «Don Simón» haste el c…y te puedes hacer unos calimoches que te tumban.
Mi hija con 15 años empezó a ir por la tarde a una discoteca ligh, de las que no venden alcohol, todas las madres, como bobas, las acompañabamos y luego a las 10 las recogiamos, A LAS 10 de la noche, no a las 5 de la mañana. Pues con el tiempo, mi hija, riendose, me dijo que alcohol no vendian, pero pastis, tripis, coca, y la madre que las pario, tenían lo que les daba la gana…Ahí que hacemos los padres??, encerrarlos en casa y que no salgan?, no darles ni un duro?.
Información tienen toda la que quieren y más, sobre esto saben más que nosotros, no son unos «niños» desamparados que no saben lo que hacen….Desde luego el que si sabe lo que hace es el que les vende todas estas mierdas y luego resulta que es el «pobrecito» y los padres los malos de la pelicula…Apoyo completamente a esta madre que ha denunciado y repito que ojala lo hubiera hecho yo. Y como dicen ahora: «yo flipo»…
Soy bicho raro: ni bebí ni fumé durante la adolescencia. Sufrí por ello la presión constante del entorno, como ahora se le llama en términos futbolísticos, sobre todo la de mis propios compañeros, que es la que duele.
A esa edad es vital el grupo. Mis colegas no eran unos borrachos pero bebían, como todo el mundo. Entonces (como ahora, pasados los 40) quedaban los fines de semana para “tomarse algo” antes de comer. Y yo, bicho raro. No digamos en las discotecas y fiestas (u ahora botellódromos), donde no se sabe qué hacer con la mano, si no se mete mano. La mano sirve para tener el vaso de licor. Ya Larra denunciaba así la represión de la sociedad española, fruto de su mala educación: los españoles, en sociedad, no sabemos qué hacer con las manos, si no podemos gestualizar a la italiana (o a la española), es decir, si estamos callados: los castellanos viejos “cuando se hallan en sociedad por desgracia sin un socorrido bastón, darían cualquier cosa por no tener manos ni brazos, porque en realidad no saben dónde ponerlos, ni qué cosa se puede hacer con los brazos en una sociedad,” señalaba Larra. ¿Es la solución que nuestros adolescentes acudan con bastón al botellódromo, igual que los políticos sostienen una estilográfica cuando comparecen en “Tengo una pregunta para usted”?
En España no se llega a los extremos de los países nórdicos (y en especial, de los del viejo telón de acero), donde hay quien ha perdido un negocio por no querer sellarlo con alcohol, pero estamos cerca. Y, con respecto al alcohol -la última intervención de Carla es reveladora-, está en el ambiente la misma actitud que con la religión católica, la cual, por cierto, exalta al vino en su más sagrado misterio: Todos los españoles, y en especial los ateos, sabemos que “nuestra” religión, aunque no creamos en ella, es “la buena”. Ese argumento es infalible contra los testigos de Jehová. Si les dices eso, ya no vuelven. En cambio, en Bolivia, en muchos lugares, me llamó la atención un letrero, ilustrado con piadosa imagen de Cristo edulcorado, del tipo “aquí ya practicamos una religión, no vengan a vendernos otra.” Ni que decir tiene que tal mensaje incitaría aún más a los telepredicadores yanquis: hay mercado, dirían. Pues eso pasa, que si no bebiesen nuestros adolescentes, no por eso se librarían de otras drogas. El mercado (legal o ilegal) del alcohol y el tabaco alienta el mercado de las drogas ilegales. Y los padres, no nos engañemos, siempre preferiremos que nuestros hijos se metan en el cuerpo “una” cerveza, como hacemos nosotros, a que tomen “no sé qué.”
Lo que he aprendido en mi mismo (para ahora que soy padre) es que lo único que librará a mi hija, en un contexto cada vez más alcoholizado, será este “coktail sin alcohol”: 1.- educación = información + ejemplo (mis padres tampoco bebían ni fumaban) y, más importante aún, 2.- FOMENTAR LA AUTOESTIMA DEL MENOR. La autoestima (y no la libertad o la prohibición, o la responsabilidad, los valores y demás) es sólo lo que permititirá al menor adoptar “sus” decisiones y no las del rebaño. Pero mucho se dice aquí con una sola palabra. Poca autoestima puede tener un menor, aunque sea Mozart, con unos padres a la greña, que lo usan como un mueble en un contexto litigioso de divorcio (el pan nuestro de cada día, en la España de hoy) o que, sin necesidad de separarse, lo colman de regalos y caprichitos.
Respecto a la denuncia de la madre, sobre la que se debate, me parece que sólo prosperará en el hipócrita contexto actual en el que los menores son inocentes y sus padres más … y la sociedad aún más, salvo el chivo expiatorio.
A principios del siglo XX, el tío Andrés Burrirrri ya tenía, en una aldea olvidada del sur de la provincia de Albacete, el bancal preparado para sembrar las patatas. Aún no las había sembrado y ya paseaba por ellas un escarabajo patatero, la temible plaga de entonces. El tío Andrés se puso a discurrir con él. Resumen de su larga arenga: “Hombre, ¿qué haces tú aquí, quién te ha dicho a ti que yo voy a sembrar aquí las patatas? … Te mataría, pero como sois tantos …” Y se marchó y lo dejó estar. Denunciar a los que venden alcohol a menores: ¿por dónde empezamos?
La batalla contra el consumo de alcohol por parte de los menores no es una madre la que la va a ganar, por más digno de elogio que sea su gesto, ni siquiera por lo que toca a que “un” local venda alcohol a su hijo (al margen de los demás menores y al margen de los otros locales). Y todos no podemos denunciar, como sugiere Carla, porque entonces no haremos otra cosa y no nos quedará tiempo para trabajar y pagar la hipoteca, si es que tenemos trabajo. Lo primero que hay que hacer es reconocer el terreno. Así está el patio. CORRESPONDE TAMBIÉN, Y SOBRE TODO, A LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS COMBATIR EL MAL, QUE PARA ESO LAS PAGAMOS. Pero ellas son las primeras interesadas en que se beba, se fume, se exceda el límite de velocidad o la vivienda se revalorice un 25% o más en un solo año, pues gracias a ello engordan la caja.
Hombre…poner una denuncia tampoco cuesta tanto tiempo…seguro que llegarías al trabajo.Como tú bien dices, a las instituciones les conviene que se consuma, por las ganancias que ello conlleva, así que tendremos que ser o tendríamos que ser los padres, los que de una forma u otra les pusieramos freno…
Con respecto a lo de dar ejemplo, todo depende del «niño»: en mi casa se fuma y se bebe (dentro de lo que se entiende lo «normal») y mis hijos son antitabaco y antialcohol. A lo mejor es por el ejemplo que les hemos dado de estar todo el día tosiendo…todo puede ser…
Poner una denuncia, Carla, sí cuesta tiempo; hay que hacer cola para ponerla pues compites con los que denuncian otras cosas, salvo si eres mujer y quieres denunciar por cuestión de género, que entonces sí que tienes una ventanilla para competir sólo con las que estén en tu mismo caso. Está perfectamente claro cuándo el poder estimula a la delación y cuándo más bien la reprime. Denunciar es incómodo por esa y muchas más razones. Amén de trabajoso: ¿pruebas?. Con todo, te doy la razón, hay que denunciar. Lo que señalaba era ese contexto en el que vivimos, que no estimula a la denuncia, al margen del angosto cauce para realizarla, sino al conformismo o, más bien, a la actitud picaresca de Pablos, el Buscón: a donde fueres, adáptate a lo que vieres. Estamos ahogados en un mar de alcohol y no nos queda más remedio, en virtud de nuestros recursos, que hacer lo mismo que cuando nos caemos al mar. No podemos denunciar al mar (o a una parte del mar) porque el agua está salada, sino nadar y guardar la ropa. Esa es la triste realidad. ¿Acaso crees que prosperará la denuncia de esta madre? Si te parece, Carla, seguimos discutiéndolo después de que Sus Señorías hagan su trabajo, si es que lo hacen.
Incluyo aquí el escrito que he insertado en otro apartado, ya que en definitiva sigue el mismo hilo:
No nos engañemos los adolescentes se iran más allá a buscar alcohol que les permita narcotizar la tan complicada andadura hacia la edad adulta, si es que la alcanzan ( a nivel madurativo). O no lo hemos hecho casí todos?.
A todos nos preocupa que nuestros hijos sepan lo que está bien o no, pero esas respuestas las encontraran ellos mismos o van a estar vigilando todo movimiento de los retoños para controlar lo debido o lo indebido. Creo que falta sensatez, y es necesario entender que a medida que crecen tienen mayor intimidad, y muchas cosas no las sabremos y es sano no saberlas porqué su vida no es nuestra vida. Otra cosa es la ceguera ante lo obvio, o el no querer escuchar.
Y otra cosa es la venta ilegal o lo que ha pensado esta madre para dar el paso…
Soy profesora de instituto y madre divorciada con dos hijos ya mayores de edad, felizmente abstemios y no fumadores. Apoyo y aplaudo totalmente la iniciativa de la madre contra la discoteca. Ojalá todo el mundo actuara igual, la concienciación aumentaría un montón. Pero lo que igualmente quisiera comentar es que cuesta mucho, muchísimo tesón, aparte de discusiones, esfuerzo, energía, coherencia y sobre todo constancia educar a los hijos y conseguir que sean unas personas responsables con sus propios actos. Hoy en día, en el instituto, veo confirmado cada día que no es posible lograr con prohibiciones externas lo que los padres no son capaces de transmitirles en sus hogares a los jóvenes: sentido de la responsabilidad, acarrear con las consecuencias de los propios actos, aspirar a una autonomía personal, pensar antes de actuar, tener sentido crítico para no dejarse arrastrar por la mayoría por muy equivocada que esta esté, y un largo etcétera. La tónica desgraciadamente muy extendida entre los adolescentes es: negarlo todo, escurrir el bulto todo lo que se pueda, mentir y protestar a voz en cuello ante cualquier llamada de atención, mostrar abiertamente toda su falta de respeto… Trabajo en un pueblo pequeño donde la diversión de fin de semana de gran parte de los niños a partir de los 12-13 años de edad, e incluso a veces antes, es…. beber alcohol. Más de un caso ha habido de niños que tuvieron que ser hospitalizados por intoxicación etílica. Lo saben los padres, que en ocasiones llegan a comprarles ese alcohol y les dejan en la calle hasta altas horas de la noche. Lo sabe la Policía Local, la Guardia Civil,… ¿Qué puedo hacer, denunciar al centro comercial por no asegurarse de que sus clientes no vayan a pasarle el alcohol a niños, a la Policía, a quién? Con frecuencia, organizamos charlas preventivas en el centro sobre alcohol, drogas, tabaquismo. Cada profesor es consciente del problema e intenta abordarlo y tratarlo en clase. Pero no somos capaces de frenar tal situación, ni lo seremos nunca, ante la permisividad de los padres, su falta de compromiso con la educación y transmisión de valores (auténticos) a sus hijos, su comodidad, ya que es mucho más fácil mirar para otro lado cuando tu hijo te la pega o te intenta torear que imponerte o darle lo que te pide con insoportable insistencia en lugar de hacerle ver, una y otra vez, porqué no puede hacer o tener ciertas cosas a su edad, o exigirle que soporte con dignidad un castigo si es merecido, y todo eso un día y otro día hasta que lo asuma como algo natural, y no una vez cara a la galería y al próximo momento nos olvidamos. Ah, por cierto, tampoco ayuda aparcar a los niños desde tempranísimas edades ante el televisor para que se callen y se traguen esos innumerables programas estúpidos, estridentes y faltos de cualquier contenido aprovechable educativamente.
Las prohibiciones y los castigos externos son muy necesarios, forman el marco legal de la convivencia en sociedad, y debe promoverse su respeto. Pero seguirán teniendo una eficacia limitada sin el trabajo serio y responsable de las familias.
Yo también aplaudo el gesto de esta madre. Los padres pueden dejar muy clarito a sus hijos las cosas, pero en una sociedad como la que vivimos, en la que son carne de cañón porque están rodeados de gente que está dispuesta a sacar beneficio económico a costa del menor, no es fácil controlar a un hijo las 24h del día. Si existe una ley que prohíbe vender alcohol a menores de 18 años, pues que se cumpla. Y me da igual si el menor compra la copa voluntariamente… pues claro que no lo va a obligar nadie, pero es ILEGAL. Así que, si le ha caído una denuncia a este local, como si le caen 20 más, que cumpla la ley y luego hable.
Por cierto… ¿¿¿educación obligatoria??? A ver, la mayoría de menores que conozco no quieren ir al colegio (voluntariamente) desde los 6 años más o menos… depende de cuando se dén cuenta de que hay que currar para conseguir las cosas… así que, ¿por qué hay una ley que los obliga? de verdad… qué injustos somos, pobres chavales que tienen que estudiar por imperativo legal…
Amigos, seamos conscientes, quizá la impotencia de esta madre al no poder controlar a su hijo haga que todos nos sintamos identificados con ella. Sé que educar a un hijo hoy en día es una tarea muy difícil y más aún si los padres nos tiramos el día trabajando y los hijos se influencian mucho más por su entorno que por la familia.
Pero también he de decir que soy amigo del dueño de uno de estos locales y que la realidad no es la que pintan. Si quieren abrir los ojos, no tienen más que ir al ‘botellódromo’ un sábado a las 2.00 de la madrugada para encontrarse con la verdad: miles de menores bebiendo alcohol delante de la que se supone que es nuestra autoridad (la policía).
La finalidad de la dirección de un negocio de este tipo no es otra que la de tener una clientela selecta, porque de todos es sabido que en el negocio de la noche los menores no tienen cabida, ya que donde entran menores, no entran ‘mayores’, que son los que realmente tienen poder adquisitvo.
Por lo tanto, debemos pensar en qué es lo que está mal realmente. Los jóvenes conocen infinitas formas de entrar en este tipo de locales, haciéndose pasar por un mayor de alguna forma o por algún otro método. Todo el que ha trabajado en la noche sabe perfectamente que ‘Menores se cuelan en todos lados a pesar de los esfuerzos porque no los haya’
La forma en la que se ha mediatizado todo este asunto, a mí personalmente, no me da más que pensar que se trata de un asunto personal de alguien. No estoy hablando de la madre, es más, no creo ni que sea la madre la que haya querido mediatizar todo esto.
Al señor Calatayud, con todos mis respetos, le pediría que antes de enfocar sus quehaceres legales con este tipo de locales, investigue el por qué, si está prohibido en nuestro país beber alcohol en la calle, en Granada puede hacerse a cualquier hora en el botellódromo y sin ningún tipo de control. Más que nada, porque al fin y al cabo son empresas y cientos de personas y de hijos de estas personas dependen de ese sueldo para comer y pagar sus hipotecas, sendos asuntos harto caros hoy día.
Muchas Gracias al que me lea.
Verdaderamente los camareros no tienen que ser policías, no pretendía ofender al gremio. No he generalizado, gente sin escrúpulos existen en todos sitios. Y cuando me refiero a endurecer las penas y que se cumplan, dije sea quien sea el responsable, ahí quiero incluir a los padres principalmente. Mi hijo no será menor siempre efectivamente y no le falta información , pero todos formamos parte de esta sociedad y muchas veces deberíamos ser como algunas especies animales donde el grupo defiende y protege a las crías. Perdón de nuevo y un saludo.
Felicidades a la madre por su valentia y determinacion!
Los menores de edad no deben probar alcohol hasta que tengan buen uso de razon
Saludos!
EN CONTRA DE LOS MADRES MODELOS!me parece indignante pero respetable la forma de pensar que tienen por aqui,la cuestio es lavarse las manos,y no es justo,tener un hijo es estar pendiente de el minimo hasta que sea mayor de edad,asi que esta madre denunciante lo que tenia que haber heho es estar pendiente de su hijo,unas horas y unas normas en casa,y decirle a todas las madres que tal vez no lo sepan que las fiestas laigth tienen un horario y evidentemente el horario es para menores!pero no pensis que el horario es hasta las 6 de la mañana.Con todo mi respeto QUIEN INVENTO LA LEY,INVENTO LA TRAMPA.
Mooner,estoy de acuerdo contigo creo que detras de todo esto hay una gran mano negra y deberian de investigarla!
y una de las cosas que deberiamos pedir todos y que nos interesa,es que cierren el BOTELLODROMO de manera que de alguna manera se comprueb que toda la gente que entra es mayor de edad porque SEÑORIA,esto si que es un grave problema,asi que soluccionemos lo que vemos todos los dias y despues ahondemos. y lo ultimo madres modelos:no querais arreglar lo de afuera cuando lo de adentro esta igual…
Yo he tratado de educar a mi hijo, quizás he fallado en alguna cosa, porque un sábado, a las seis de la tade le vendieron whisqui, en el centro de A Coruña con quince años. Evidentemente los tenderos no son policías, pero aquí todo el mundo hace la vista gorda y al cabo del año hay unos 200 comas etílicos de menores en ciudades medias .
Si mi hijo con quince años bebe en la calle a las tres de la mañana, es mi responsabilidad, si bebe a las cinco de la tarde, sin que la policía local, tan eficaz a la hora de recaudar multas, ni siquiera mire para ellos, a lo mejor es que todos tenemos un poco que rascar.
Yo hice examen de conciencia para saber en qué me he equivocado, porque es algo que no me esperaba, pero también denuncié al establecimiento y al local a donde se dirigió tras ingeriri el alcohol, porque en vez de llamarme para hacerme cargo del chico, lo tiraron a la calle. Al final todo se quedará en nada, pero creo que si bien es un error tratar de judicializar la educación y sin eludir nuestras responsabilidades, no es normal que se haga la vista gorda ante el consumo de alcohol en edades tan tempranas.
Madre de tres niños,una adolescente de 14 años.Vivo en Terrassa y justamente estos dias estamos recojiendo firmas para prohibir o mejor dicho cumplir la ley de no vender alcohol a los niños menores de 18 años entre un grupo de padres del colegio.Las firmas recojidas son incontables,no existe ni un solo padre o madre que se oponga a manifestar frente a nuestro alcalde nuestra indignación.Mi reflexión va más allà.Como puede ser que la mayoria de estos padres que han firmado han consentido o permitido que sus hijos acudierán este Sábado a la discoteca cuando la entrada era para mayores de….Mi hija fue la unica en quedarse en casa,podeis imaginaros como.Mis tres hijos nos ven como «raros»y «diferentes»,nos decian que si todos los padres lo consentian y nosotros no el que erraba eramos nosotros.
Aplaudo a está madre,pues si ha denunciado su indignación es porque no le daba igual que su hijo andará por la disco o en todo caso le permitió ir por la ignorancia de lo que podria ocurrirle.Evidentemente que la culpa no sólo la tienen los locales,sino que aqui estamos todos,padres por ser permisivos y no saber o querer educar dignamente,educación o escuelas por no enseñarnos como hacerlo,y enseñar más a nuestros hijos lo que está bien de lo que está mal,y por supuesto nuestro gobierno que no actua consecuentemente.Mi pregunta es ,¿por que entre tanta gente que está en contra no podemos mejorar la formación de estos jóvenes que el dia de mañana serán los que nos van a gobernar?
Por ultimo,
Si requiere de un esfuerzo una denuncia ,sino habrian muchisimas más.Me apuntó a hacerlo si un dia me hace falta.
Creo que los pequeños gestos, pueden tener una repercusión extraordinadia. Así que felicito a esta madre y de paso, escribo para contarles que un grupo de madres, padres y educadores, también estamos llevando a cabo una iniciativa. Consiste en recoger firmas en nuestros municipios para recordarles a las autoridades que están obligadas a cumplir la ley respecto a la venta y dispensación de alcohol a menores de 18 años. Nos basamos en el estudio que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) publicó en el mes de marzo, en donde a través de un estudio de campo (in situ) se constató que Barcelona es la segunda ciudad de España más permisiva en cuanto a la venta y dispensación de alcohol a menores. En el estudio, se hace constar que desde tiendas tipo «24h», pasando por cadenas multinacionales de comida basura (donde nuestros adolescentes van con demasiada frecuencia, diría yo), bazares de barrio (en los que no tienen ni el cartel que indica la prohibición), hasta supermercados, se les facilita el acceso al alcohol a nuestros menores. Algo que ya sabíamos (y muchos padecíamos cada fin de semana) pero de lo que no disponíamos era de datos más objetivos. Nos preocupa que al tratar de educar como familias y como educadores sobre los riesgos asociados (y constatados científicamente) a la ingesta del alcohol, una parte de la sociedad especialmente relacinada con el ocio, les envíe un mensaje que contradice el nuestro y nos invalida. Como sociedad, todos estamos obligados y limitados, al cumplimiento de la ley, ¿por qué se hace la vista gorda con esta ley que afecta a personas en pleno desarrollo intelectual, físico, social y emocional? Así que estamos recogiendo firmas en toda la provincia de Barcelona. Si alguien está interesado en trasladar esta iniciativa a su ciudad, puede ponerse en contacto con nosotros a través de la página web http://www.juanimesa.com les facilitaremos el documento de recogida de firmas y el informe de la OCU, detallando este estudio. Finalmente, agradecer que exista este blog a sus autores y especialmente al Sr. Calatayud al que consideramos un referente en lo judicial de cómo se tiene que entender y aplicar, el valor de Educar.
Antes de todos pedir disculpas por llegar tan tarde a este foro y por descubrir el Blog en este momento.
He de decir que yo soy Abogado, y que antes de todo como muchos jovenes, he trabajado en la noche y ahora defiendo en algunas ocasiones causas parecidas.
Yo sólo quería lanzar unas preguntas, no para defender a las Discotecas, sino para ponernos en algunas situaciones.
La venta de alcohol esta prohibida a menores de 18 años,¿que medidas debe tomar este tipo de establecimientos donde permiten entrar a menores, a partir de los 16 años para que no puedan consumir alcohol?
Creo que todos en ocasiones hemos estado en uno de estos establecimientos que por cualquier motivo estaba lleno, ¿cómo puede un camarero pedir a todas las personas D.N.I.? hablamos quizas de 1.500 consumiciones servidas.
Como en todos los ámbitos hay todo tipo de empresarios, los buenos los malos y los regulares. Y esto no debe servir de excusa para que tengan una salida legal, auque reitero que hay que ponerse en situación y saber que la imaginación que tienen estos chicos para engañar diría que no tiene límite (he visto casi de todo).
Yo partiría por una educacion en casa correcta, unos valores.
Creo que es más facil prohibir esa entrada a ese público y en consecuencia penar al que deje acceso. Así aunque el empresario pierda dinero, no estará expuesto al peligro de los engaños, de falsificaciones de D.N.I..
Creo que la conviviencia de la norma con la realidad social choca.
Un saludo a todos.
Buenas, pues estoy haciendo un trabajo para el instituto sobre el alcohol y acabo de ver esta noticia y la verdad es que me a sorprendido, yo soy menor de edad y me parece que el denunciar a la discoteca no es lo que debería haber hecho esa madre, tengo 15 años y no me suelen atraer las discotecas y no bebo, yo creo que una madre tiene que educar a su hijo, protegerlo, escucharlo,entenderlo, y sobre todo darle a conocer las cosas como el alcohol para educarlo desde pequeño que eso no es bueno y enseñarle los riesgos que conlleva, el hecho de que la madre denuncie a la discoteca me parece una falta de atención hacia su hijo, yo también estoy a favor de que en los comercios, discotecas, y todos esos establecimientos no ofrezcan alcohol a los menores pero ellos no educan a los niños, no olvidemos que los educadores son los padres quizás lo que tendría que hacer con ese niño sería sentarlo a su lado y explicarles como van las cosas, que consecuencias que hay y hacerle ver que eso no le llevara a nada bueno. Bueno, pues esa es solo mi opinión desde mi punto de vista no veo el por que aplaudir a esa madre.