Hemos vuelto. Después de unos días de silencio, aquí estamos de nuevo. No podemos decir que el blog vuelve a la vida, porque, gracias a vosotros, nunca ha dejado de latir. Gracias, valga la repetición, por vuestro interés y perseverancia. Nos despedimos hablando de una de esas criaturas excesivas que producen estos tiempos locos de atar: el pistolero del eclipse, un rapaz que presumía, delante de las cámaras de televisión, de drogarse ante la Guardia Civil. Una ‘hazaña’ que, por supuesto, no sirve para nada. Pero así es el siglo XXI: ininteligible.
Hace nada, escuché en la radio que la justicia francesa -creo- había prohíbido a una niña de trece años dar la vuelta al mundo en un velero. Los jueces no tenían claro que la chiquilla fuera lo suficientemente madura para llevar a cabo esa hazaña, cuya utilidad -sobre todo, si se tiene en cuenta la edad-, también se me escapa.
Nuevos tiempos, nuevos retos. O como cantaban los Ilegales: tiempos nuevos, tiempos salvajes.
Empieza el túnel del otoño. En lo más oscuro, aguardan la gripe A y la crisis. Estoy convencido de que, al final, no será para tanto.
Seguimos en contacto. Y, sí, don Emilio también está de vuelta. Tiene mucho que contar.
Yo aquí seguiré haciendo visitas a vuestra interesante página.
Un saludo
Ya era hora!!!. Bienvenidos!!.
La verdad es que leyendo el futuro que espera, más bien me has hundido en la miseria…Pero como tú dices, esperemos que no sea para tanto. Y a ver cuando el juez da señales de vida: o es que le ha gustado esto de las vacaciones o es que está sin parar, como siempre…pero sobre todo espero que este bien. Besos.
¡¡Bienvenidos!!
Me alegra mucho teneros de vuelta por aquí.
Un abrazo
Bienhallados!
Yo también quise irme a dar la vuelta al mundo con 13 años, pero nunca lo dije. En fin, bienvenidos.
Ya era hora…….os echábamos de menos. Espero que hayais vuelto con las pilas recargaditas y con nuevas ilusiones.
Saludos