Diversos medios de comunicación, con buen criterio en mi modesta opinión, está recurriendo a expertos en la materia a la hora de abordar el dramático crimen de Seseña. El caso es que la mayoría de los informadores han acudido a don Emilio y éste, que acostumbra a hablar claro, ha dejado claras sus opiniones al respecto (por cierto, el primer lugar en el que habló del suceso de Seseña fue en este blog, que para eso es el suyo). Pero, además, habló de otros casos igualmente sangrantes y con menores implicados. Por ejemplo, mencionó al Rafita, uno de los homicidas de Sandra Palo. Pues bien, según don Emilio, el hecho de que el Rafita, estando como estaba en situación de libertad vigilada, no ingresara en un correccional después de, presuntamente, haber vuelto a delinquir, sginifica que hubo un fallo de coordinación. Si un chaval que está en libertad vigilada reincide, los responsables de vigilarlo en -en este caso, la Comunidad de Madrid- deben comunicarlo de inmediato al juez y al fiscal para que adopten las medidas oportunas: en un caso de esta gravedad, lo lógico sería volver a encerrarlo. Si eso no se hizo, es que fallo el sistema. Curiosamente, y esto ya no lo dijo Emilio sino que lo digo yo, el presumible fallo fue cometido por una administración, la Comunidad de Madrid, que está gobernada por un partido, el PP, que cada vez que ocurre un hecho luctuoso en el que están involucrados menores reclama un endurecimiento de la Ley del Menor. Pregunto: ¿Antes de exigir medidas excepcionales no sería más correcto que doña Esperanza y los que dependen de ella hicieran bien su trabajo? Cuánta alarma social nos ahorraríamos si fuera así. Un saludo.
QUE BIEN ESCRIBES SOBRINO Y QUE RAZON TIENES SOBRE EL RAFITA