En España está prohibida la venta de alcohol a menores de 18 años, pero un 94% de los adolescentes y jóvenes asegura que nunca nadie les ha puesto pegas para adquirir bebidas alcohólicas. Es una de las conclusiones del libro ‘Hablemos del alcohol: por un nuevo paradigma del beber adolescente’ que ha sido coordinado por el sociólogo vasco Javier Elzo.
Elzo, que ha presentado el libro hoy, Día Mundial Sin Alcohol, dijo que el Parlamento debería estudiar la posibilidad de rebajar el límite legal para beber alcohol de los 18 a los 17 o 16. En este sentido abogó por acabar con las «actuales disfunciones» que existen entre la edad legal para ingresar en la cárcel, poder tomar la píldora del día después o tomar alcohol.
A juicio Elzo estas diferencias de edades «se dan de tortas».
Hasta aquí la noticia y ahora la reflexión: parece que el juez Calatayud no es el único que cree que hay que unificar criterios para no volver locos a los menores (que es algo de lo que se ha habla en este blog con frecuencia: la última vez hace unos días). Él lo llama el Pacto por el Menor. Lo de menos es el nombre: lo importante es que la idea empieza a cuajar. Nuestros chavales no pueden ser mayores para operarse y menores para ponerse un ‘piercing’: es absurdo.
Fuentes: EFE y www.alcoholysociedad.org