El calendario dice que hoy es el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil, una práctica lamentable que antepone el dinero a cualquier otra consideración (así nos va). El espectacular crecimiento económico (que tanto admira a ‘los mercados’) de algunos de esos países a los que llamamos emergentes no es ajeno a ese despreciable fenómeno. Aquí pensamos que no vale todo. Es más noble padecer la crisis que robar a los niños su infancia.
Aquí os dejamos una información de Europa Press sobre el estado de la cuestión en España. «La trata de niños es la principal forma de explotación infantil en España, donde los jóvenes se convierten en víctimas de explotación ‘laboral’ – o lo que se conoce como explotación para la comisión de hurtos y mendicidad- y sexual, según ha explicado Save The Children.
Con motivo del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, esta ONG también ha calificado a España como «país de tránsito» para estas explotaciones, al tiempo que ha pedido más recursos para «reparar» el derecho de las víctimas.
A pesar de que los perfiles de las víctimas pueden variar en función de las dinámicas de las redes de explotación y de las demandas de los clientes de servicios sexuales, suelen ser menores en torno a los 16 años, de origen comunitario aunque, en menor medida, se han encontrado víctimas menores de edad de origen africano, según ha detallado Save The Children».