En realidad, todo está dicho en la pregunta que sirve de título a este blog. Como periodista, pero, sobre todo, como ser humano, observo con tristeza el espectáculo que acompaña a cada sesión del juicio por el asesinato de la infortunada Marta del Castilla. Insultos y acoso a los familiares y los abogados de los acusados. Sé que igual no es políticamente correcto, pero me pregunto: ¿en qué ayuda eso a los padres de Marta? ¿Sirve para aliviar su dolor? Mantener la compostura no es un signo de debilidad. Al contrario.
El respeto es fundamental en esta sociedad, a pesar de todo el dolor, tanto para los acusados como para la víctima, sino no avanzamos.
Carlos Morán, que tiene usted razón…Mantener la compostura no es un signo de debilidad…Pero cuando uno está inmeraso en el dolor y la indignación, el llanto y tanta tristeza, le aseguro que es dificil contenerse. Estamos hablando de casos graves. Es fácil dialogar cuando insultan a tu hijo, por ejemplo, y llegar a un consenso, mediando con las más apropiadas palabras, pero cuando a tu hijo lo
asesinan… El asesinato de Marta del Castillo podía haber sido el de nuestro hijo ¡¡Que suerte hemos tenido, Carlos!! ¡¡ No es nuestro hijo!!