El capitán Francesco Schettino, el presunto responsable del hundimiento de esa ciudad-rodante que era el buque de crucero ‘Costa Concordia’, ha alegado en su descargo que no abandonó la nave, sino que se cayó accidentalmente a un bote salvavidas y ya no pudo regresar al barco siniestrado (casualmente, dos de sus oficiales, también imputados, cayeron, en el mismo bote). Al margen del juicio que nos merezca la explicación de Schettino -mis hijos tienen siete y doce años y les dio la risa cuando la escucharon-, historias como ésta demuestran que hay adultos cada vez más infantiles, personas que se niegan a crecer porque no saben cómo hacerlo. Schettino tendrá un montón de titulos y hablará varios idiomas, pero, a sus 50 años, no sabe lo que es la responsabilidad. Y la responsabilidad es lo que distingue a un adulto de un menor. A Schettino le pagan diez veces más que a un camarero para que sea responsable, pero, cuando llega el momento, se quita de en medio y deja el timón al camarero. Ser responsable es tener la valentía de estar a las duras y a las maduras. Dar la cara y admitir los errores. Eso se supone que se adquiere con los años…, pero ya vemos que no. ¿Qué educación recibió este hombre para que todavía no haya superado la edad del pavo? Ahí está también el caso de Pepe y el pisitón a Messi, pero esa es otra historia… de un niño malo con apariencia de señor mayor.
Un saludo.
jajjajjaj…es del TBO, no es que sea infantil…es que es idiota!. Este lo que se cree es que todos somos como él…aún no se ha dado cuenta que él es el que va en «sentido contrario»!.
merci beuacoupo pour cet article, ca m’a aidé dans mon article !