Buenas, soy Emilio Calatayud. Sí, nos estamos tomando un pequeño respiro, como ya os comentamos. Pero poco a poco hay que regresar a la realidad. Con motivo del aniversario del inicio de la crisis, comentaba Carlos en qué hemos cambiado. Porque es verdad que nos ha cambiado. A algunos, en grandes cosas -los que han tenido la desgracia de perder su trabajo- y a otros -los que tenemos la suerte de conservarlo- en pequeñas cosas. Miras mucho más que antes lo que gastas. Por ejemplo, yo me he dado cuenta que aprovecho más la ropa que antes. Dura más que antes. También recurro a esas tiendas que te hacen reparaciones y arreglos. En lugar de cambiar, reciclo. Ya digo, son cosas pequeñas, pero casi de forma inconsciente, las voy haciendo. ¿Y vosotros?
Por ejemplo, gasto cada vez menos en cosas que vengan de muy lejos, y muy conscientemente. Porque a la hora de la verdad hemos visto cuál es la diferencia entre lo que nos decían que era una Unión Europea y el Mercado Común que es el que realmente tenemos.
He cambiado en cuanto ahora planto tomates y pimientos en vez de tulipanes, hago panes y bizcochos en vez de comprarlos y busco alimentos locales para ayudar al comerciante local.
¿Y a que sorprende lo mucho que se ahorra? Creo que en lo que está cambiando la gente (alguna, porque la crisis no es para todos igual, como se ve todos los días en todos los mundos del ocio)es precisamente en darse cuenta de tanto gasto innecesario. Esto no beneficia a las empresas, que viven del consumo, consumo irracional en su mayoría de casos. Entonces, hay que pensar qué estarán ingeniando para subsanar esto. Muchas compañías cierran -como ya vemos-, pero otras están adelantandose al futuro aceleradamente.
En mi opinión, el cambio en el modelo productivo tiene mucho que ver con ésto. Pero eso son palabras mayores para otro foro y otro debate.
Saludos y a seguir con el blog, que algo alivia!