Buenas, soy Emilio Calatayud. Vivimos en mundo muy contradictorio. Las nuevas tecnologías ha cambiado el concepto de intimidad: por no decir que lo han hecho desaparecer. Los menores, sobre todo los menores, van dejando su imagen y su vida por todo Internet, pero luego vas a la Universidad, es un ejemplo, para preguntar por las notas de tu hijo mayor de edad -él no te las quiere dar- y no te las proporcionan porque tiene derecho a la intimidad. Igual las conoce todo el mundo porque él lo ha contado en Facebook, pero tú, que eres el padre o la madre, no te enteras. Yo creo que si son los padres los que pagan la matrícula, tienen derecho a conocer las notas de su hijo, aunque sea mayor de edad. Otra cosa es que se haya independizado. Entonces sí me parece normal que no rinda cuentas. Pero lo otro no lo entiendo.
Estoy de acuerdo con usted Don Emilio, no entiendo que para unas cosas son muy ‘mayores’ y para otras muy ‘menores’. Doy clases en la escuela primaria y un día cité lo que usted dice de: ‘vives en mi casa, y no trabajas, entonces el ordenador es mío, el celular es mío, la habitación es mía, hasta la cama donde duermes es mía…’ causó un revuelo que casi casi me sacan del salón a empujones (estoy en México, aclaro), pero al borde de la puerta les dije en voz bastante alta: soy la maestra, un respeto por favor que les abro expediente. Cuando se calmaron noté con un gran asombro que en las cabezas de esos chicos no cabe esa idea, se sienten con el derecho a todo, en cualquier momento, y definitivamente eso si es responsabilidad de los padres que lo consienten; si a una crianza ‘rara’ le sumamos estatutos de los colegios o universidades de protección a sus datos y tal cosa, bueno, ¡qué bien los armamos! Un saludo siempre y gran admiración a sus sensatos mensajes.
Buenos días,
una buena reflexión, pero cómo el profesor o la administración sabe que la persona que paga es el padre o es el hijo independizado. Conozco a varias personas que aunque viven en la casa de los padres la matrícula de la universidad se la pagan ellos.
No sería más fácil para los padres indicarle al hijo que tiene que traer un certificado de notas (existe, aunque es de pago unos 20€) al finalizar el curso académico y en el caso negativo no seguir pagando la matrícula.
Personalmente lo recomiendo a cualquier persona que esté estudiando, para verificar de forma fehaciente que no se ha cometido ningún error administrativo al introducir sus notas en el sistema informático.
Un saludo,
Moisés Martín
Hola,
Yo he estado en esa situación, la de ocultar parcialmente mis notas al principio de la carrera y mis padres pagarme la matrícula. Evidentemente con el tiempo me di cuenta de que era un error y lo mejor era compartir las alegrías y los fracasos.
En cualquier caso, es decisión del alumno de 18+ años rendir cuentas a sus padres que se lo pagan todo al igual que lo es de los padres mantener a su hijo más allá de los 18. Entiendo que ni uno ni otro deberían estar obligados en ningún caso.
Un saludo
Si un hijo no te dice las notas, hay un problema de confianza y de comunicación, en algo se ha fallado en la educación en la trasnmisión de ejemplo, valores y confianza
Si no te dice las «notas» es que son malas, el problema claramente no está en las notas (existen muchos metodos de conocerlas), el asunto es la falta de comunicación, ya que habrá otras muchas importantes que no te cuente y no puedas conocerlas.