José Chamizo, Defensor del Pueblo y del Menor en Andalucía, presenta en Granada su (recomendable) libro ‘¿Quién ha dicho que vivir sea fácil?’. Durante el acto cuenta que en Sevilla ha habido varias familias de postín venidas muy a menos que se han pasado cuatro o cinco días sin comer porque les daba vergüenza pedir. Uno de los mayores problemas de los pobres actuales, dijo Chamizo, es que no saben serlo. No están preparados para enfrentarse a su nueva situación y se esconden de la realidad. ¡Como si eso fuera posible! Es uno de los efectos más llamativos de la crisis. Nadie vende guías para ser pobre.
El Defensor recordó en este sentido que la crisis ha ‘democratizado’ al máximo el concepto exclusión. Cualquiera, vosotros o yo, puede ser un excluido, eso que antes conocíamos como marginados. ¿O acaso no es un excluido un joven que ha terminado sus estudios, domina un par de idiomas y, sin embargo, no encuentra trabajo y ha de quedarse en casa porque no tiene ni un euro para gastar?
Escuchar a Chamizo siempre es interesante.