La moraleja que se desprende de esta noticia es simple: A menudo en Internet las cosas no son lo que parecen -en la vida real también ocurre, claro-. Hay que andarse con ojo. La noticia es de la agencia Efe. «Un británico ha sido condoenado a catorce años de prisión por hacerse pasar por el ídolo adolescente Justin Bieber y persuadir a menores por Iternet de que le enviaran imágenes y vídeos realizando actos sexuales.
Según informan medios británicos, Robert Hunter, de 35 años, fue detenido después de que una joven de Tasmania (Australia) denunciara los hechos y se encontraran hasta 800 vídeos de menores que el británico guardaba en su casa en Brough Court, este de Inglaterra».