Buenas, soy Emilio Calatayud. En el anterior comentario hablaba de la necesidad de que los ciudadanos en general conozcan las cosas que se hacen bien en España con el dinero de nuestros impuestos, que son muchas. Yo me referí a centros de menores, porque es lo mío, pero puede valer para todo: hospitales, centros para ancianos o de investigación, etc. Si hasta las empresas de hamburguesas invitan a los ciudadanos a visitar sus fábricas. ¿Por qué no se puede hacer lo mismo con los servicios públicos?. Pero, bueno, esa era la reflexión del otro día. El caso es que, pensando en eso, caí en la cuenta de que tampoco se conoce a los políticos que se dedican a los menores. Eso sucede, siempre lo digo, porque los políticos de menores son los menores de los políticos, y es una pena, porque hay gente muy válida. Por cierto, y esto también lo digo siempre, los jueces de menores somos los menores de los jueces, pero no pasa nada…