Buenas, soy Emilio Calatayud. En Andalucía tenemos este año elecciones autonómicas, municipales y nacionales, pero no tengo demasiadas esperanzas de que nuestros políticos aborden temas referidos a los menores. Casi nunca lo hacen. Pues a mí se me ocurren algunos asuntos sobre menores que podrían tratarse en las elecciones que nos aguardan. Por ejemplo, deberíamos pensar si es bueno que los chavales que encerramos porque han cometido delitos graves tengan que tener una paga de 400 euros al mes. Es decir, que los reeducamos, les quitamos las adicciones si las tienen (o lo intentamos), les damos ‘casa’ y comida y, además, 400 euros. Creo que habría que replantearse este tema. Y no solo porque nos ahorraríamos un dinero que, tal y como están las cosas, se podría emplear en otras cosas. Hay algo más preocupante: que alguien cometa un delito para cobrar los 400 euros. Imaginemos un padre desempleado que está desesperado y le dice a su crío: «Hijo, vete a robar, a ver si hay suerte, te cogen y cobramos los 400 euros para poder comer».
Tampoco estaría mal que se debatiera en las campañas electorales sobre cómo podemos corregir a nuestros hijos sin arriesgarnos a acabar detenidos en comisaría. Por ejemplo, prohibimos a nuestra hija que salga de casa hasta que no haga los deberes y ella coge el teléfono móvil -que le hemos comprado nosotros, porque somos así de listos- y llama a la Policía para decir que sus padres la han secuestrado… Y ya estamos de albañiles. A ver si algún político habla de estas cosas, que falta hace.