Dicen en las noticias que el Juzgado Central de Menores de la Audiencia Nacional, que es el que se encarga de juzgar a los menores implicados en delitos de terrorismo, ha condenado a dos años de internamiento a una niña de 15 años que quería viajar a Siria o Irak para ser yihadista. Me imagino que lo que harán con esta niña será ‘desprogramarla’ reduciéndole las dosis de religión para que dedique más tiempo a la Lengua y Matemáticas, que es algo que abre mucho la mente.
No quiero ser pesimista, pero me temo que vamos a tener más casos de este tipo.