Aquí os dejamos una historia sobre un menor violento. Aparte de la pena de encierro, los padres del joven tendrán que pagar a la víctima una indemnización que, como mínimo, superará los diez mil euros. Porque los padres son responsables de lo que hacen sus hijos… Conviene tenerlo en cuenta.
«La espeluznante paliza estuvo precedida de un incidente nimio. Un chaval con dificultades para caminar tropieza y cae sobre un niño que juega en una calle del centro de la capital granadina. No pasa nada grave, pero el hermano del pequeño ataca enfurecido al chico que había sufrido el traspié. Alarmada, la madre de este último se interpone para proteger a su hijo y el agresor se lía a patadas con ella. La mujer queda malherida. Siente un fuerte dolor en un costado y es trasladada de inmediato a un centro hospitalario de la ciudad. Allí, los médicos comprueban que tiene el bazo destrozado y proceden a extirparle esa víscera para evitar males mayores.
El autor de la salvaje acometida ha sido condenado ahora a 18 meses de internamiento y seis más de libertad vigilada.
La condena fue de conformidad. Es decir, que el chico aceptó la pena sin necesidad de que se celebrara la vista oral del juicio y, en consecuencia, fue declarado culpable de un delito y una falta de lesiones. Además de la medida privativa de libertad, el acusado y sus padres tendrán que indemnizar a la víctima con una cantidad que se determinará durante la ejecución de la sentencia. En este sentido, solo el Servicio Andaluz de Salud reclama 9.632 euros por la asistencia médica y quirúrgica que prestó a la mujer herida. El encausado y sus padres también deberá abonar 630 euros al hijo de esta última, que surtió varias contusiones antes de que su madre se interpusiera y se llevase la peor parte».