Buenas, soy Emilio Calatayud. Antes de nada una confesión: yo también tengo ‘guasap’, pero eso no quiere decir que no vea su parte mala, porque la tiene. Cada vez hablamos menos y ‘guasapeamos’ más. Y eso no es. Ya he escuchado a chicos o chicas decir: «He dejado a mi novia -o novio- por ‘guasap'». Pues muy mal. En la vida hay que enfrentarse a las situaciones cara a cara. A las buenas y a las malas. Tampoco está bien dar el pésame a un familiar través del ‘guasap’. Es de mala educación. Como mínimo, hablemos por teléfono con ese familiar. Pero si estamos cerca, vayamos a darle un abrazo, que lo agradecerá. Un red social no puede sustituir al contacto humano, a lo que hemos hecho toda la vida para distinguirnos de las piedras. No son cosas antiguas o de viejos. Es educación. Digo yo.