Buenas, soy Emilio Calatayud. Leo en el periódico que la Audiencia de Murcia ha dado la razón a un padre que quería dejar de pagar las pensiones de alimentos a dos hijas ‘ni-nis’ que no hacían ni el huevo. Las niñas, de 27 y 23 años, cobraban 700 euros cada una por no estudiar y no trabajar. El padre, que perdió el pleito en primera instancia, acudió a la Audiencia, que ahora sí le ha dado la razón. El hombre consiguió convencer al tribunal de que sus hijas no eran unas víctimas de la crisis, si no que no ponían nada de su parte para salir de su situación. Porque una cosa es un ‘ni-ni’ forzado y otra muy distinta, un ‘ni-ni’ que se gusta. Un gandul, vaya. ¡Bien por mis colegas de la Audiencia de Murcia! Nuestros hijos tienen derechos, y está muy bien que así sea, pero también deberes.