Buenas, soy Emilio Calatayud. Leo que el 80% de los pensionistas españoles dedica una parte de sus ingresos mensuales a ayudar a sus hijos y nietos (antes de la crisis, el porcentaje era solo del 20%). Me lo creo. Es más, seguro que son el 90% o más. Voy a hablaros de mi propio caso -que es el que mejor conozco-. Lo primero que tengo que decir es que soy un privilegiado y que sé que hay muchas personas que tienen bastantes más problemas que yo. Hecha la aclaración, yo podría jubilarme antes de que acabe el año. El próximo día 31 de octubre cumpliré 35 años como juez -27 de ellos, como juez de Menores- y en diciembre haré los 60. Así que podría jubilarme, pero lo cierto es que no puedo. Tengo que seguir ayudando a mis hijos. Y tampoco sé si podré jubilarme a los 65… Afortunadamente, mis hijos trabajan, pero, aún así, tengo que seguir echándoles una mano porque no son autosuficientes. Hoy en día, y a diferencia de lo que ocurría cuando yo era joven, tener un trabajo no es garantía de independencia. Tenemos que esforzarnos en convencer a nuestros hijos, si es que no la saben ya, de que son la primera generación que va a vivir peor que sus padres. Es duro, pero es así.
Y yo no tengo nietos…