Buenas, soy Emilio Calatayud. Contrariamente a lo que se pudiera pensar, la mayoría de los ‘chorizos’ son inteligentes, incluso bastante inteligentes. Lo que hay que hacer es procurar reconducir esa inteligencia para que no sean atraídos por el lado oscuro de la fuerza. Recuerdo que una vez le dije a un ‘choricillo’ que tenía encerrado: «Si aprendes a leer y escribir, te dejo en libertad». Aprendió en dos meses. Y le deje salir.
Los ‘chorizos’ necesitan su tiempo de curación, es lo que le digo siempre a las madres. Y unos necesitan más tiempo y otros menos. Igual que los embutidos.