Hola, soy Carlos Morán, el compañero de blog de don Emilio. Dicen que hay otros mundos, pero que están en este. Y es cierto. Si echamos un vistazo a nuestro alrededor veremos paisajes e historias que nos dejarán helados. Aquí va una de ellas. Esperamos que os interese. «En el turbio mundillo de las organizaciones de narcotráfico ‘al por menor’ tiene una especial importancia la figura del ‘aguaor’, ya que es la persona que se encarga de ‘dar el agua’, esto es, de alertar a los ‘camellos’ de la eventual presencia de la Policía.Pero es que, además de vigilar, los ‘aguaores’ también suelen acompañar a los adictos hasta el punto de venta. E incluso pueden asumir la función de ‘comerciales’, de captadores de ‘clientes’. En otras palabras, que llevan a cabo tareas de seguridad y de ‘promoción’ del negocio, de ahí su relevancia.
Pues bien, en 2015, un agente encubierto de la Policía Nacional identificó a una ‘aguaora’ de sólo 15 años durante una operación antidroga que se desarrolló en la capital granadina y que se saldó con la detención de varios adultos, entre ellos, la madre y la abuela de la niña en cuestión.
En el piso que presuntamente servía de base a la red de traficantes, los investigadores hallaron casi diez gramos de cocaína, cerca de cinco mil euros y diversos utensilios habitualmente usados para ‘cortar’ y pesar la droga.
Los mayores de edad supuestamente implicados en estos hechos aún están pendientes de juicio, pero la adolescente, la presunta y precoz ‘aguaora’ ha sido juzgada por la supuesta comisión de un delito de tráfico de estupefacientes que causan grave daño a la salud».