Buenas, soy Emilio Calatayud. Me cuentan la historia de una madre que ha obligado a su hijo a viajar el pasado. Ha sido más o menos así: «Le quitado el móvil, la ‘tablet’, la Nintendo’ y hasta la ‘tele’. Ahora es como un niño del siglo XVIII. Es que es muy malo. Pero el caso es que tampoco ha mejorado su comportamiento».
Pues nada, señora, siga aplicándole recortes y no pare hasta llegar a la Edad de Piedra. No desfallezca. Estamos con usted.
Por cierto, si vuelve la ‘mili’ a España, a mí que no me echen la culpa, ja, ja, ja.