Buenas, soy Emilio Calatayud. Si yo fuese hoy un chaval de catorce años, con todo lo que eso supone, estoy seguro de que no acabaría siendo juez. Cuando yo era un chaval de catorce años, teníamos pocos entretenimientos y muy simples; ahora, en cambio, un chaval de catorce años tiene todo el mundo a su alcance. Así es complicado ser niño. Es difícil ser padre, sí, pero también es muy difícil ser hijo. Insisto, me conozco, y sé que si hubiese nacido en el siglo XXI, no sería juez. Prefiero no pensar en lo que sería…, pero igual ya me hubiese merecido alguna sentencia ejemplar. No digo más.