Buenas, soy Emilio Calatayud. Todos los años tenemos la suerte de que alumnos de Derecho que están terminando los estudios quieran hacer prácticas en los juzgados y la fiscalía de Menores. A nosotros nos sirve para rejuvenecer y conocer a los futuros abogados, jueces, fiscales, secretarios, funcionarios en general… En realidad aprendemos más nosotros que ellos, porque nos dan una visión distinta del mundo.
Lo que aprenden ellos es gracias a los niños que pasan por estos juzgados y a sus familias. Esto fue lo que nos dijeron los últimos que estuvieron con nosotros: «Hacer prácticas en Menores te sirve para ser jurista, pero también para ser madre, para prepararnos para cuando nos toque ser madres, que, por lo que hemos visto aquí, puede no ser fácil». (hablaban en femenino porque todas menos uno eran mujeres: el futuro de la justicia es de las mujeres, pero la lección también vale para los futuros padres).
También nos dijeron que la experiencia les sirvió para interiorizar la idea de que tener un hijo maltratador, un chico que agreda a los padres, «es algo que puede pasarle a cualquiera y es muy difícil afrontar».