Buenas, soy Emilio Calatayud. Os voy a contar una historia real y luego haré una reflexión al respecto. Empieza el curso en un colegio de infantil y primaria de un pueblo de Granada. En una de las aulas de los más pequeñines, un niño de tres años le pega a un compañero. Luego, coge una silla y golpea a otro alumno. La maestra, escandalizada, le dice que se esté quieto y el niño le pega también a la maestra. Lo llevan a dirección y, allí le dicen que como no deje de agredir llamarán a la Guardia Civil. Contestación del niño: «Pues yo llamo a mi padre para que os pegue».
Y ahora la reflexión: ¿Hasta donde bajamos la edad penal? ¿Hasta los dos años? O la ponemos directamente en los recién nacidos y si se cagan en su madre (con perdón), los denunciamos por maltrato. Me río por no llorar.