Buenas, soy Emilio Calatayud. Varias abuelas y abuelos nos comentan que se están viendo obligados a convertirse de nuevo en padres por la vía de los hechos consumados: «Con 60 años, tengo que ser la madre de mi nieto porque mi hijo quiere vivir la vida». En fin. Bastante bien salen algunos niños con los papás y las mamás que tienen. Ser ‘ni-ni’ y padre genera estas cosas. ¿Qué se puede hacer? Veamos:
- Tragar quina y cuidar de los nietos hasta que el hijo pase la adolescencia, si es que la supera alguna vez, y se haga cargo de sus hijos.
- Denunciar que los nietos están en situación de desamparo para que se haga cargo de ellos el Estado, es decir, todos nosotros. Y, después, si hay fuerza y ganas, los abuelos pueden pedir la custodia de los chavales para que no se críen en un centro.
- Entregarlos al cónyuge que tenga dos dedos de frente.
- Y en cualquier caso, echar de casa la ‘vivalavirgen’, que denuncie si quiere y ya decidirá la justicia.