Buenas, soy Emilio Calatayud. Vamos un poco tarde porque ha hecho un día estupendo y hemos estando disfrutando de él (vale, también hemos visto fútbol, pero poco). Al lío. Somos tan tontos, y me incluyo, que vamos dejando nuestra vida en Internet, incluidas las chorradas, claro. Lo que antes comentábamos en el bar con cuatro amigos, ahora lo ponemos al alcance de cualquiera. El resultado es gracioso. Un ejemplo, si alguien aspira a un alto cargo en España -y ahora que hay meneo por el cambio de gobierno, hay muchos- lo primero que hacen los candidatos no es repasar la Constitución o la estructura del Estado… No, su prioridad es borrar todas las tonterías que han escrito en las redes sociales, que es como querer borrarse ellos. ¿Alguien confiaría en otro alguien que quiere mostrarse como no es? Yo soy más partidario de a lo hecho, pecho… y que Dios reparta suerte.