Buenas, soy Emilio Calatayud. Leo y escucho que han pedido que la Fiscalía actúe contra los padres de dos niñas de seis y siete años que han convertido a sus hijas en ‘youtubers’. Las pequeñas, presuntamente, aparecen maquillándose para irse de fiesta y cosas por el estilo. Si todo esto es así, porque todo el mundo tiene derecho a la presunción de inocencia, lo de los padres de estas niñas es de vergüenza. Y si lo hacen por dinero, peor todavía.
Pero hay otro dato tan preocupante como ese: la cuenta de Youtube tiene ¡11 MILLONES de suscriptores! ¿Qué hacen once millones de mirones viendo el ‘espectáculo’ de cómo se maquillan niñas de seis y siete años? ¿Estamos tontos? ¿Así educamos a nuestros hijos? ¿Qué pasa con el interés superior de los menores?
Los padres, de pena; el Estado, también de pena por no actuar antes: y los once millones de suscriptores, penosos.