Buenas, soy Emilio Calatayud. Recientemente, hicimos un comentario en el que criticábamos el uso de una limusina para transportar a los niños que estaban celebrando su comunión en una parroquia de Granada. Pues bien, hemos de rectificar y lo hacemos con agrado. La madre de uno de los niños comulgantes nos ha comentado que el coche solo era para uno de los ocho niños que ese día hicieron su primera Comunión, con lo cual, el derroche era todavía mayor. Se nos sigue yendo la pinza. Pero no a las familias de los otros siete niños. Un saludo y un beso para ellas.
Y ahora a votar y, ojalá, a celebrar el ascenso a Primera del ‘Graná’.