Buenas, soy Emilio Calatayud. Seguimos con el tema de ayer. Nos quejamos de que nuestros menores se saben todos sus derechos, pero desconocen sus deberes. Pues a nuestros parlamentarios (diputados, senadores, diputados autonómicos…) parece que les sucede lo mismo. Quizá es porque son tan jóvenes que se criaron oyendo hablar de derechos, pero no de deberes. El caso es que ser representante de la soberanía popular comporta derechos y deberes, y seguramente, más deberes que derechos. Pero los nuestros solo hablan de sus derechos, de lo importantes que son porque les han votado no sé cuántos millones de personas, etc y de los puestos y cargos que merecen… Pero de los deberes, ni pío. Un mal ejemplo para los menores.