Buenas, soy Emilio Calatayud. Quiero dar las gracias a todas las personas que me atendieron en el hospital de Puente Genil después de que me diera el síncope en el AVE. Mis ángeles del la guarda fueron: Javier, Gema (enfermeros); Luisana, Gerardo, Javier y Mercedes (médicos); Teresa, Lola, Carmen (auxiliares, celadoras, supervisión). Y también doy las gracias al personal de la ambulancia. Todos ellos son grandes profesionales de la sanidad pública andaluza.
Por lo demás, pido perdón a los viajeros del AVE por las molestias y el retraso. Por cierto, me dijeron que el AVE no lleva desfibrilador, Si es así me parece una grave imprudencia fácilmente subsanable.
Gracias a todos de corazón.