Una reflexión: la alegría que da cuando ves que tus hijos están encarrilados y te dices: «No lo hemos hecho tan mal»

 

Buenas, soy Emilio Calatayud. Como hoy es día de reflexión, yo estoy en ello. Y me ha venido a la cabeza esta reflexión: qué alegría, y alivio, se siente cuando ves que tus hijos están encarrilados y te dices: «No lo hemos hecho tan mal».

Aunque ahora haya padres y madres que estén leyendo este comentario y les parezca imposible que eso les ocurra a ellos, seguro que también les llegará el día de disfrutar de ese instante.

 

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