Buenas, soy Emilio Calatayud. Hay rebrotes. Esto no es ser paranoico. Y no solo está pasando aquí, también en Alemania y otros países. No somos inmunes. Ni nosotros ni ellos. Todos tenemos que poner de nuestra parte para que no tengamos que encerrarnos de nuevo en casa. Y para que no se llenen las UCI. Y para que no haya más muertos. He visto en la tele un macrobotellón en las playas de Cádiz para celebrar San Juan, pese a que no estaba permitido.
Chavales, ¿vale la pena jugarse la salud de la familia por un botellón? La salud de la familia o de uno mismo, porque también enferman jóvenes de veinte y treinta años. Y os aseguró que lo pasan fatal. Solos con su fiebre y una fatiga que no les permite ni moverse. Y así durante un par de semanas. O más.
No vale la pena. Pues eso.