Buenas, soy Emilio Calatayud. Entre la propaganda de las apuestas, los peinados y los tatuajes de los jugadores y la dictadura del dinero, cada vez me siento más alejado del fútbol. Además, una de las lecciones que nos dejó el confinamiento es que podemos vivir sin fútbol y no pasa ‘na’. Pero, claro, el ‘Graná’ va a jugar en Europa por primera vez en su historia y da alegría. Y hace falta algo de alegría.