Buenas, soy Emilio Calatayud. Todos los días tienen su afán y están dedicados a algo o a alguien. Por ejemplo, hoy toca a los abuelos, que es una buena idea, aunque solo sea por la guerra que les damos (que nos dais, porque yo también soy abuelo). Bueno, pues para celebrarlo voy a reproducir las palabras que me dijo hace unos días una niña de siete años en la Alpujarra de ‘Graná’: «Se ha muerto mi abuelo y yo voy a ser la sombra de mi abuela para que no esté sola».
Un primor, como dicen por aquí. Hay futuro.