Buenas, soy Emilio Calatayud. A veces llegan mensajes a través de las redes sociales que te reconcilian con el mundo y que te recuerdan que las nuevas tecnologías también sirven para transportar cariño y emoción. El próximo día 25 de este mes hará nueve años que falleció Azucena, mi mujer y la madre de mis dos hijos. Pues bien, me ha escrito Reyes para contarme que tuvo un papel importante el día de mi boda. Importante y precioso. Y me ha conmovido.
«Estoy visitando a mis padres estos días y, rebuscando en los tesoros de mi infancia, encontré un vestido y una foto que me trajo muy buenos recuerdos. Yo fui una de las niñas que ayudó a llevar la cola del vestido de novia en su boda con Azucenaí. Encontré el vestido casi 40 años más tarde y ahora mis nenas juegan a princesas con él entre risas y aventuras que les cuento. Quería compartir esta anécdota para alegrarle el día y sacarle una sonrisa por los viejos tiempos».
Has logrado las dos cosas Reyes.