Buenas, soy Emilio Calatayud. Al paso que vamos, me voy a quedar sin trabajo. Mis queridos ‘choricillos’ ya no son lo que eran. Cada vez son más nobles. Me explico con un ejemplo. Estaba juzgando el otro día a un chaval y le pregunto: «¿Por qué estás aqui?». Y él me responde: «Por hacer el tonto». Y yo le digo: «Pues te voy a condenar por hacer el tonto». Y él va y me da la razón: «Hace usted muy bien».
Nada, que me quedo sin trabajo. Ya vienen rehabilitados de casa, ja, ja, ja.