Buenas, soy Emilio Calatayud. El fútbol ya hace tiempo que dejó de ser un deporte para convertirse en otra cosa. Hay jugadores de sólo 11 años, y menos, que ya tienen representantes como si fueran estrellas de la Champions. Lo dijo el otro día el presidente del Celta: el habló de «subastadores de niños». Por mi parte, lo que digo es que hay que dejar que los niños sean niños. Y no convertirlos en adultos a empujones.