Buenas, soy Emilio Calatayud. Lo confieso (no es la primera vez que lo hago ni será la última): no me gustaba ir al ‘cole’, vamos, que fui un niño normal. Para convencerme, me decían eso tan clásico de ‘verás a tus amiguitos’ y yo pensaba: ‘ya los veo fuera’.
Pero me aguantaba, porque era disciplinado. Y aguantando, aguantado, aprobé las oposiciones para juez. Y hasta le han puesto mi nombre a un colegio en Numancia de la Sagra, provincia de Toledo.