Buenas, soy Emilio Calatayud. Ves el bullicio que hay en Granada (y en toda España) y parece que no ha pasado ‘na’, que la pandemia es una pesadilla que ocurrió hace cientos de años. Y eso es bueno y es malo. Bueno, porque significa que estamos saliendo del trauma colectivo y porque la máquina de la economía está empezando a funcionar. Pero también puede ser malo si cerramos está página tan dramática sin hacer un examen de los fallos y de lo que se puede mejorar.