Buenas, soy Emilio Calatayud. Antes, cuando yo era joven, irte de casa con veinte años era una liberación. Yo pude hacerlo con 24 porque conseguí un trabajo fijo: aprobé la oposición de juez. Ahora, la liberación es quedarse con los padres hasta los cuarenta. En unos casos es por las crisis, los salarios tristes y lo caro que está todo, y, en otros, por vagancia.